La Conductora del Programa “La Voz de Armenia TV”, de Nueva York, EEUU, le realizó una entrevista al Sr Vazkén Yacoubian. presidente de la filial de Armenia de la UGAB
La señora Kocharian inicia la entrevista destacando el rol de la UGAB en el mundo a través de sus filiales, mencionando especialmente el trabajo en Armenia.
Kariné Kocharian: Como presidente de la filial de Armenia ¿podría decirnos cuáles son para usted las obras y realizaciones más importantes durante los últimos años, hasta el inicio de la guerra?
Vazkén Yacoubian agradece la invitación y menciona que su trayectoria en UGAB se inicia en Siria, su lugar de nacimiento. Al trasladarse a Armenia integraba el Consejo Central de la Institución y en 2015 es designado presidente de la filial de Armenia.
Vazkén Yacoubian: como usted dijo, la Asamblea Mundial es bienal y debía haberse realizado el año pasado, pero la pandemia nos obligó a postergarla varias veces y a organizarla en esta nueva modalidad que es el zoom, lo cual tuvo sus ventajas ya que teníamos previsto más de 400 participantes de 35 países, un número inédito en nuestras asambleas.
En esta Asamblea se presentó el trabajo global de la UGAB de los años 2018-2019.
Retomando su primera pregunta, quisiera referirme al trabajo que nuestra organización lleva adelante en Armenia.
Nosotros hemos sido siempre fieles a nuestro apostolado y los lineamientos de nuestro trabajo fundamental siempre han sido dirigidos al desarrollo de los programas culturales, educativos, benéficos y humanitarios.
Específicamente dentro de Armenia, desarrollar el aspecto económico con el objetivo de garantizar nuestra identidad y el bienestar de nuestro pueblo.
Como usted dijo, nuestra Institución se fundó como una entidad social y, hasta hace cinco años, en Armenia éramos considerados como una organización benéfica que realizaba donativos, no más que eso.
Desde hace cinco años quisimos desarrollar una nueva estrategia para que nuestra organización fuera considerada no sólo benéfica y no sólo como una organización de la Diáspora que ha venido a Armenia para realizar donaciones, sino para llevar adelante diversos proyectos.
Esta nueva estrategia fue seriamente evaluada durante un año y medio. Decidimos que la UGAB debía ser considerada tanto una organización extranjera de la Diáspora como, así también, una organización de Armenia; y refiriéndome a una organización armenia quiero decir cercana a la sociedad, conocemos sus necesidades y dolores, al mismo tiempo estamos al lado del gobierno y de sus autoridades, sabiendo de sus prioridades; entonces modificamos nuestra “fisonomía” de ser sólo una entidad benéfica a ser una organización con una estrategia coordinada.
Al decir esto me refiero a que en este tipo de organización convergen diferentes actividades. Es decir, comenzamos estudiando las necesidades, las prioridades del Estado, del gobierno, incluso las preferencias de las organizaciones internacionales con respecto a Armenia, evaluando esos lineamientos entonces observamos cuáles son los temas importantes que la UGAB de por sí abarca dentro de sus límites y, entonces, proyectamos nuevos programas y los concretamos, y los medios para concretarlos son diferentes. Podemos concretarlos nosotros directamente, o con la cooperación de diferentes organizaciones o, como ha sido en el pasado, como organización benéfica.
Entonces, reuniendo todos estos elementos, convertimos a nuestra organización a través de esta nueva estrategia, de una organización benéfica a una organización con una coordinación estratégica.
En este sentido hemos desarrollado nuevos programas. Hoy, dentro de Armenia llevamos a cabo diferentes proyectos, más de 30, directamente nosotros junto a nuestros colaboradores.
Usted pidió referirme a los programas de los últimos dos años. Sería difícil, son demasiados. Pero voy a referirme a algunos de los más importantes que hemos desarrollado tanto en Armenia como en Artsaj.
Ya que este mes, de acuerdo a la tradición en Armenia, se considera el Mes de la Mujer, desde el 8 de marzo al 7 de abril, comenzaré hablando sobre los programas dirigidos a las mujeres.
Como usted sabrá, muchos estudios realizados sobre Armenia han demostrado que, por año, en Armenia se pierde en un 14 % la presencia de la mujer en la actividad productiva y hemos considerado este vacío al haber estudiado la situación. Por lo tanto organizamos un evento dedicado al empoderamiento de la mujer, que incluía seis diferentes programas. Mujeres emprendedoras; mujeres programadoras; mujeres conductoras; programa de apoyo a mujeres embarazadas; programa de apoyo a través de especialistas (este se basa en el apoyo a las participantes de otros programas en Armenia, a través de especialistas de la Diáspora que la UGAB convoca para apoyar y concretar sus programas, con el objetivo de elevar su productividad, enseñarles cosas nuevas, obteniéndose ya resultados positivos). Y el sexto programa, el programa “Aní” que, a través de voluntarios de la Diáspora, les enseña el idioma inglés a las mujeres que participan de todos los programas mencionados.
Todo este proyecto global es muy importante y se están obteniendo enormes resultados.
El otro proyecto que quiero mencionar es el de los invernaderos, que se encuentra en la etapa de prueba piloto. Hemos dispuesto invernaderos en la región de Ararat para familias carenciadas. Pero no es solamente obsequiar estos invernaderos el objetivo del programa. El proyecto se entrega como parte de un objetivo global para su desarrollo. Se les hace entrega de plantines, de brotes, se les indica qué plantar y cuándo, se les facilita un especialista que los visita semanalmente y los asesora en la tarea a realizar, y también les garantizamos la compra y la reventa de sus productos. Este importante programa forma parte de los proyectos de desarrollo económico.
Continuamos con los programas relacionados con los armenios de Siria, procurando becas para los niños en edad escolar, becas para los estudiantes de las universidades estatales, y también proveemos atención médica especializada.
En relación a los programas en Artsaj, que ya llevan décadas en desarrollo, mencionamos el patrocinio de la Orquesta de Cámara desde hace más de 10 años; la sede de TUMO en Stepanakert que funciona bajo nuestros auspicios; hemos desarrollado una nuevo programa en cooperación con la Universidad Americana denominado “Aprende y gana” que tiene diferentes componentes, cursos de inglés, cursos de liderazgo; y también en cooperación con el gobierno de Artsaj desarrollaremos programas de liderazgo en áreas de gobierno que proponga el mismo Estado, con el objetivo de elevar los niveles de rendimiento en esas áreas.
Un inmenso proyecto es el que venimos desarrollando con las familias llegadas desde Siria, a las cuales les hemos procurado y abastecido con todo tipo de elementos para cubrir sus necesidades. Hemos importado más de 20.000 olivos de Siria para su cultivo, realizando un importante trabajo de desarrollo y acondicionamiento de las áreas a cultivar. Pero esa etapa ya se ha superado y ahora el trabajo y la producción están en manos de sus destinatarios.
He resumido mucho los programas en desarrollo pero quise ofrecer un panorama global de nuestro trabajo, para que se comprenda que no somos una entidad de la Diáspora que hemos venido a entregar sumas a diestra y siniestra, sino que nuestros programas son el gran resultado de los estudios de situación que hemos realizado, e intentamos tener el mayor impacto en diferentes ámbitos en pos de cuestiones impostergables.
El señor Yacoubian continúa refiriéndose ahora a lo realizado durante la guerra de Artsaj.
Habiendo unido nuestras fuerzas a las del Fondo Nacional Armenia, con la colecta “Nosotros somos nuestras fronteras” y disponiendo 5.000.000 de dólares de base que serían duplicados a través de la colecta, debo decir que estos 10.000.000 de dólares lograron reunirse en sólo cuatro días, siendo entregados al Fondo Nacional Armenia.
Desde el primer día los funcionarios y colaboradores de las oficinas de la UGAB de Ereván se transformaron en voluntarios, y a estos trabajadores y voluntarios se sumaron muchísimos otros voluntarios; nuestros scouts, estudiantes de las diferentes universidades, etc.; organizamos colectas, con cierto apoyo financiero provisto por el Consejo Central y, durante esos días, desde nuestra oficina y en varias oportunidades se han movilizado autos que llevaban ayuda humanitaria de Ereván a Artsaj, con todo tipo de artículos de primerísima necesidad, garrafas, generadores de energía, alimentos, medicinas, etc., etc.. Y esta tarea se desarrolló en la misma magnitud hasta los últimos días de la guerra.
Asimismo, a medida que las familias desterradas iban llegando a Armenia, el Ministerio de Trabajo y Acción Social de Armenia había dispuesto un operativo de línea directa, centralizado en uno de los Centros de Niños “Hayortiats” de la UGAB, desde donde las 24 horas del día nuestros scouts procuraban conseguir todo lo necesario para abastecer a estas familias.
Al mismo tiempo, nuestra oficina en coordinación con la oficina Central y demás filiales comenzamos un trabajo de divulgación en ámbitos extracomunitarios de los valores históricos y culturales armenios de Artsaj, a través de informes que se elaboraban bajo la denominación de “Testimonios de Artsaj”, publicados y difundidos diariamente a través de las redes sociales, con el objetivo de que el mundo conociera la herencia cultural e histórica existente desde cientos y miles de años en Artsaj, lo cual era imprescindible para revertir las manifestaciones del enemigo.
Paralelamente organizamos, junto a las filiales de Francia y Nueva York, diferentes y valiosos informes a través de las redes, dirigidos a diversos países y ámbitos internacionales, para instalar el tema de Artsaj, los aspectos históricos y demás acontecimientos.
Junto a nuestros jóvenes de Europa organizamos las visitas a Armenia y a Artsaj de medios de prensa europeos y de otras regiones como, así también, de políticos y funcionarios de estado, logrando una gran repercusión.
Se llevaron a cabo encuentros con funcionarios de los gobiernos de Artsaj y Armenia.
Debo decir, por supuesto, que la ayuda humanitaria con alimentos y demás elementos, continúa de manera permanente.
Luego de la guerra, como saben, teníamos 100.000 ciudadanos de Artsaj desterrados.
Una parte había sido evacuada a diferentes regiones de Artsaj que se encontraban bajo el control de Armenia, y otra gran parte fue ubicada en diferentes regiones de Armenia.
Junto a los gobiernos de Armenia y Artsaj, nos hicimos cargo del auxilio de estas familias y hasta el día de hoy se les provee lo necesario. Alimento, calefactores, teniendo en cuenta que se han transitado varios meses de intenso frío, ropa de abrigo, colchones, sábanas, mantas, etc., y al día de hoy debemos decir que la campaña de ayuda concretada y lo programado llegará a 9.500 familias, aproximadamente 37.000 personas.
En ocasión de la Navidad y el Año Nuevo y con la colaboración de los jóvenes de las filiales de Francia, hemos entregado obsequios a más de 5.500 niños de Artsaj, distribuidos a través de las iglesias, con la colaboración de la Santa Sede de Etchmiadzín y de la Diócesis de Artsaj.
La tarea humanitaria continúa; esperando que la situación cambie y, para continuar desarrollando programas en perspectiva, necesitamos un serio estudio de la situación, lo cual estamos realizando, y pensamos que hasta finales de marzo tendremos los programas de mediano y largo plazo en progreso. Programas que deberán ser mucho más eficaces y más estratégicos. Las necesidades son enormes, y nuestro trabajo se centrará en ello y pensamos concretarlo con la colaboración de nuestras filiales.
K.K.: estimado Vazkén, en su brillante alocución durante la sesión de la 91ª Asamblea Mundial, el presidente Berge Setrakian dijo que este es el momento para que el pueblo armenio determine y reafirme su identidad.
En este momento tan excepcionalmente difícil de Armenia ¿qué tipo de pasos concretos está previendo la UGAB en general para que Armenia pueda superar y salir de esta enorme crisis?
V.Y.: ante todo debo decir que la UGAB siempre y por siempre ha estado junto a Armenia y sus gobernantes, sin detenerse en qué fuerza o quién está al frente del país. Sin dudas continuaremos trabajando en esta dirección. Y como dije antes en el caso de Artsaj y del mismo modo en Armenia, las necesidades en todos los frentes son muy grandes y, para que nuestros programas sean más efectivos, tienen que estar basados en estudios de situación. Paralelamente a la evaluación de la situación en Artsaj, estamos realizando lo mismo en Armenia para fundamentar en qué dirección y con qué prioridades accionar.
K.K.: considerando que la UGAB es una organización social, sin embargo en este período agónico de nuestro país con gran sabiduría ha llevado adelante una política en pro del pueblo armenio, se ha involucrado en la política. Y esto ha sido así desde su fundación. Su fundador Boghós Nubar participó en el Congreso Internacional a principios del siglo XX, presentando cuestiones de la política de Armenia y haciendo oír nuestra voz.
Hoy Armenia no sólo transita una profunda crisis económica sino, también, política. ¿De qué manera se involucra la UGAB en los temas de política interna de Armenia?
V.Y.: es correcto, la UGAB es una organización social, no política, sin embargo tiene tomada una seria postura política y debe tenerla, ya que la UGAB es una organización nacional, que actúa desde hace más de un siglo y en el transcurso de este siglo la Nación Armenia ha pasado por diversas crisis durante las cuales la UGAB no sólo ha tenido una postura seria y denodada, sino que ha actuado de manera vital para sacar a la Nación Armenia de esas situaciones de crisis.
Usted recordó muy bien lo actuado por Boghós Nubar. A principios del siglo XX él encabezó la delegación nacional armenia, donde se debatía acerca de serias situaciones que la región atravesaba en ese momento. Y, en definitiva, la firma de Boghós Nubar fue estampada en el Tratado de Sevres, firmado el 10 de agosto de 1920.
Luego de este acontecimiento devino la Unión Soviética, Armenia pasó a integrarla e incluso en ese período, en 1924, Boghós Nubar fundó un centro médico en Ereván, en 1931 fundó el barrio de Nubarashén que hoy tiene más de 12.000 habitantes.
Durante su presidencia, Calouste Gulbenkian llevó adelante negociaciones con las autoridades soviéticas y uno de los principales temas fue garantizar que la Santa Sede de Etchmiadzín conservara sus jurisdicciones y continuara su funcionamiento dentro de Armenia.
Luego, durante la presidencia de Arshak Karagueozian, entre 1946 y 1947, se organizó una importantísima repatriación de la Diáspora occidental, que tuvo un decisivo impacto para la Armenia soviética.
Recordamos muy bien la actitud de Alex Manoogian cuando tuvimos la gran crisis de la Iglesia en 1956, y para él era determinante que la UGAB estuviera al lado de la Santa Sede de Etchmiadzín y era insistente en que Etchmiadzín debía estar dentro de Armenia, en la Madre Patria.
Lo continuó su hija Louise Manoogian Simone, con una activa intervención en ocasión del trágico terremoto de 1988 en Spitak y su ayuda incondicional, y debemos recordar y espero que la historia algún día lo recuerde en detalle, su vital apoyo durante la primera guerra de Artsaj.
En concreto, la UGAB, siendo una organización nacional no puede permanecer en silencio e indiferente frente a serios desafíos, a las serias crisis de nuestra Nación. Hoy está claro que nuestro pueblo, no sólo Armenia, nuestra nacionalidad está frente a una crisis existencial. La experiencia que tenemos en la Diáspora en relación a los programas de preservación de nuestra identidad nos demuestra que es una tarea muy difícil y, con el tiempo, se hace aún más difícil.
Cuando Armenia declaró su independencia, nuestra organización tuvo una posición muy clara con respecto a direccionar todas nuestras fuerzas en pos de su fortalecimiento, porque Armenia es la garante de la preservación de nuestra nacionalidad.
Nosotros como organización nacional no podemos permanecer indiferentes al ver los peligros que amenazan a nuestra nacionalidad. Y veo muy naturalmente y deseo que así se entienda, que una organización como la UGAB no puede permanecer en silencio.
Con todo lo dicho, debemos tener en claro que cuando la UGAB se manifiesta en relación a algún tema político, de ninguna manera es para beneficiar a nuestra organización. Nosotros no somos un partido político que tenga expectativas a partir de sus manifestaciones. Nos manifestamos sin esperar nada, es decir, nuestras manifestaciones, nuestra postura y nuestro accionar sólo y solamente son en beneficio de nuestra Nación y de su fortalecimiento.
Por lo tanto, así como nos manifestamos y el doctor Setrakian volvió a señalarlo en su mensaje durante la Asamblea, desde nuestro punto de vista lo más importante para nosotros hoy es direccionar en un mismo sentido todas nuestras fuerzas, unidos y solidarios. Dejando de lado partidismos e intereses políticos. Y este potencial, sea en Armenia como en la Diáspora, de manera muy sencilla podemos reunirlo y codo a codo llegar a nuestro objetivo que es salir de la crisis.
K.K.: ¿qué nuevas obligaciones y desafíos ha puesto en manos de sus filiales en el mundo y especialmente de la filial de Armenia, la 91ª Asamblea de la UGAB?
V.Y.: con los acontecimientos de los últimos años, el COVID, la guerra, y teniendo en cuenta nuestra experiencia sumada a los avances tecnológicos, sabemos que tenemos muchas posibilidades de cooperar con las filiales utilizando nuevos sistemas y, en cuanto a los programas en desarrollo podemos, más rápidamente y de forma coordinada, concretarlos de la mejor manera.
La experiencia que hemos tenido durante estos últimos dos años trataremos de aplicarla de manera más eficaz, incluyendo y haciendo participar aún más a nuestras filiales en los programas que llevaremos a cabo en Armenia, para que el impacto sea aún más importante.
K.K.: ¿cómo podría el ciudadano armenio y especialmente los jóvenes ser útiles para el trabajo que lleva adelante la UGAB?
V.Y.: debo confesar que una de las falencias de nuestro trabajo es no informar al público en general y a la juventud en especial acerca de los programas que nosotros desarrollamos en Armenia, pero se ha probado que cuando los jóvenes tienen la oportunidad de informarse acerca de los programas, se movilizan muy rápidamente y se suman para participar en su concreción.
Especialmente quiero mencionar a los jóvenes de Francia que en gran número y de manera voluntaria han viajado gradualmente a Armenia en grupos. Hay grupos que han viajado con proyectos propios y otros que han venido a sumarse a aquellos programas en curso.
Acerca de los programas que la UGAB lleva adelante, por supuesto puede encontrarse información en nuestra página oficial y en nuestras redes, y el público en general puede conocerlos y ser partícipe de los mismos, pero debo decir que, ciertamente, esta tarea debemos mejorarla para informar de manera más efectiva al público y, especialmente, a los jóvenes, de cuya participación hemos visto resultados muy positivos y hemos comprobado que ellos están listos y no son indiferentes, como se podría pensar de las nuevas generaciones y de su desinterés acerca de los temas armenios, esto está muy lejos de la realidad.
A nosotros nos corresponde informarles acerca de los programas y especialmente de los objetivos de cada programa. La nueva generación debe saber y convencerse de que el objetivo de cada proyecto va en consonancia con sus ideas y pensamientos. Si ese mensaje llega de la manera correcta, la inclusión de ese joven en cualquiera de los programas será muy sencilla.
Kariné Kocharyan agrega que en los últimos años, especialmente en la última década, muchos jóvenes se han sumado a los programas de la UGAB, en diferentes áreas como la educación, las ciencias, lo social, lo humanitario. En este sentido se puede decir que la UGAB está siempre joven. Y en este sentido hemos visto cómo nuestra juventud, desde la lejana Diáspora hasta Armenia, está tan sensibilizada con los temas armenios, lo hemos visto en estos últimos tiempos, cuando toda la juventud como un solo hombre se puso de pie… y siempre he dicho que viéndolos puedo decir que realmente el armenio es eterno e invencible, empezando por nuestros soldados y terminando por nuestros jóvenes en todo el mundo.