EREVÁN (Azatuyun) — Un representante de la dirigencia política de Armenia defendió el lunes 20 de enero su falta de condena o reacción contra los juicios de ocho ex líderes de Nagorno-Karabaj que comenzaron en Azerbaiyán el viernes 17 de enero.

Entre los acusados ​​se encuentran tres expresidentes de Karabaj y Ruben Vardanian, un multimillonario y filántropo nacido en Armenia que ocupó brevemente el cargo de Secretario de Estado de Karabaj entre 2022 y 2023. También están siendo juzgados otros ocho armenios de Karabaj que también fueron capturados por Azerbaiyán durante y después de su ofensiva militar de septiembre de 2023 que obligó a toda la población de Karabaj a huir hacia Armenia.

Ni la oficina del primer ministro Nikol Pashinian, ni el Ministerio de Asuntos Exteriores de Armenia, han emitido alguna declaración oficial sobre el inicio de las audiencias en un tribunal militar azerbaiyano, denunciado por activistas armenios de derechos humanos, como una parodia de la justicia.

Vahagn Aleksanian, vicepresidente del partido Contrato Civil de Pashinian, confirmó que el silencio de Ereván, denunciado por la oposición armenia, es deliberado.

“Si creen que un par de duras declaraciones para consolar a los prisioneros hubieran contribuido a la liberación de ellos, se equivocan”, dijo a los periodistas. “Una mayor publicidad sólo obstaculizaría este proceso (de intentar que Azerbaiyán libere a todos los prisioneros armenios)”.

"No pueden hacer declaraciones tan inmorales y presentar su inacción como una ayuda a los prisioneros", respondió Armen Rustamian, un destacado legislador de la principal alianza opositora Hayastan.

Rustamuian afirmó que el gobierno de Pashinian simplemente tiene miedo de enfadar a Bakú debido a su política de apaciguamiento en el conflicto con Azerbaiyán.

“Por eso, (las autoridades armenias) están sacrificando todo: nuestra identidad, nuestro territorio y a estas personas (juzgadas en Bakú) que son moneda de cambio para ellos en este gran juego”, denunció.

El Congreso Nacional Armenio (HAK), un partido de oposición liderado por el ex presidente Levon Ter-Petrosian, condenó de manera similar a Pashinian por su “obvia y completa indiferencia ante el destino de los líderes capturados de Artsaj”.

“Armenia está obligada a alzar públicamente su voz para defenderlos, a hacer de la cuestión de su liberación una de las condiciones necesarias en la agenda de la reconciliación y la paz entre Armenia y Azerbaiyán”, afirmó el HAK en un comunicado del fin de semana.

Aleksanian, el representante del partido gobernante, también insinuó que algunos de los antiguos dirigentes de Karabaj detenidos en Azerbaiyán, en particular Arayik Harutyunian, son los únicos responsables de su cautiverio.

“Desearía que nuestros colegas de Nagorno-Karabaj nos hubieran escuchado y hubieran ido a Sofía a negociar (con Azerbaiyán antes de la ofensiva de septiembre de 2023) en lugar de escuchar a las fuerzas de oposición armenias”, dijo.

Tigran Abrahamian, otro legislador de la oposición, dijo que tales declaraciones son una burla a las promesas del gobierno de Pashinian de luchar por la liberación de todos los prisioneros armenios que permanecen en Azerbaiyán.

El otoño pasado, los críticos locales ya acusaron a Pashinian de ayudar a Bakú a legitimar el encarcelamiento de Vardanian con sus mordaces comentarios sobre el magnate. En una conferencia de prensa en agosto pasado, el primer ministro armenio se preguntó quién le había dicho a Vardaniuan que renunciara a la ciudadanía rusa y se mudara a Karabaj en 2022 y “con qué propósito”.

Pareció hacerse eco de las afirmaciones anteriores de los líderes azerbaiyanos de que Vardanian había sido enviado a Karabaj por Moscú para servir a los intereses rusos allí. Vardanian respondió a Pashinian en una declaración en septiembre emitida por su familia.

Antes de su captura, Vardanian y los ex presidentes de Karabaj criticaron duramente a Pashinian por reconocer públicamente la soberanía azerbaiyana sobre Karabaj.