El rápido avance de los rebeldes Haya Tahrir al-Sham (HTS) desde Alepo a Hama, luego de Homs a Damasco, respaldados por Turquía, derrocó en sólo 12 días el gobierno de mano dura del régimen de Assad en Siria, que comenzó en 1970.

El panorama político de Siria está cambiando a una velocidad vertiginosa. Mientras que los grupos de oposición históricos y un sinnúmero de refugiados dan la bienvenida a los acontecimientos actuales, la guerra Siria está lejos de ser considerada como terminada. Las minorías alauitas, cristianas, ismaelitas y, en menor medida, drusas siguen con gran cautela los acontecimientos

Abandonado por sus aliados Rusia e Irán, Bashar al-Assad se convirtió en víctima de las consecuencias del gran alcance de la guerra de Ucrania y del conflicto iniciado por Israel el 7 de octubre de 2023. Su ejército, agotado por 13 años de guerra civil y corrupción, se volvió incapaz de resistir sin la cooperación de Hezbollah, los combatientes chiítas y Rusia.

Décadas de presión económica internacional y la consiguiente existencia de negocios criminales de drogas, han impedido que el eslabón más débil del grupo de resistencia chiíta, los alauitas, se reorganicen y tomen las medidas adecuadas.

Al rechazar los llamados de Ankara a un acuerdo negociado, Bashar al-Assad enfrentó la inesperada realidad de la fragmentación de su país sobre una base federal. En 2017, Rusia propuso una enmienda constitucional que habría creado regiones autónomas en el norte para los grupos de fuerzas kurdas patrocinados por Ankara y se concedería un estatus especial a las estructuras costeras del régimen alauita.

Hoy se desarrolla ante nuestros ojos el peor escenario posible, que recuerda a los acontecimientos en la Libia post-Gaddafi, debido a los inevitables conflictos socioreligiosos entre las minorías kurda y drusa.

Revelando el papel de Turquía

Después de su retórica inicial de no tener nada que ver con los ataques insurgentes, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, finalmente admitió la participación de su país en los acontecimientos. Rusia estaba preocupada por la cuestión de Ucrania, los partidarios de Irán en el Medio Oriente fueron sometidos a una destrucción masiva por parte de Israel y  Estados Unidos se mostró complacido de que Turquía estuviera asumiendo un papel de liderazgo en Siria.

Para los estadounidenses que mantenían una presencia militar en el este y el centro de Siria, el cambio de régimen presumiblemente significaba que el nuevo gobierno al menos no representaría ninguna amenaza para Israel.

Israel, a su vez, utilizó el derrocamiento del régimen para establecer de inmediato el control de los altos del Golán y, por lo tanto, crear una zona de amortiguamiento de seguridad para sí mismo.

Es probable que Alepo y sus regiones queden subordinadas a Turquía económica y políticamente, creando un estatus híbrido similar al del norte de Chipre.

Turquía persigue dos objetivos al mismo tiempo, panturquismo (que apoya a los combatientes turco sirios) y panislamismo (que apoya al actual gobierno de Damasco, que se guía por los principios de la "Hermandad Musulmana" Siria).

Estos acontecimientos están generando preocupación entre la menguante población cristiana de Alepo y otras minorías, que apreciaron mucho el enfoque tolerante de Assad hacia ellos.

¿Por qué lo peor está por llegar?

Abandonado por su aliado Rusia en los frentes Norte y sur, el régimen de Assad en realidad fue víctima del acuerdo ruso-turco, que recuerda la situación en Artsaj, donde Rusia sacrificó a los armenios en nombre de los intereses geopolíticos. Si bien es posible que Rusia intente mantener sus bases en las zonas costeras alauitas, aún así ya no podrá garantizar la estabilidad en Siria por sí sola. Los grupos rebeldes que se dirigían a Damasco tenían un objetivo común. derrocar a Bashar al-Assad.

Haya Tahrir al-Sham (HTS), la última encarnación de la rama siria de Al Qaeda, y sus yihadistas se enfrentarán inevitablemente con los combatientes del Estado Islámico (EI),  que se están reagrupando en el este de Siria. Mientras que las "fuerzas democráticas de Siria", en su mayoría lideradas por kurdos, siguen de cerca los eventos, listos para defenderse. El esperado caos recuerda el derrocamiento de Irak y Saddam Hussein en 2003. Las vidas y los bienes de las minorías se encuentran en una situación precaria. Mientras los combatientes del HTS están tranquilizando a los armenios de Alepo y a los cristianos en general con palabras tranquilizadoras, estos últimos están en una atmósfera de incertidumbre porque fueron tomados por sorpresa tanto por el desarrollo demasiado rápido de los acontecimientos como por la inesperada caída de las fuerzas leales.

Los armenios sirios, muchos de los cuales son ciudadanos armenios, están confundidos por la incapacidad del gobierno armenio para cooperar adecuadamente con las comunidades armenias sirias, especialmente después de la decisión de evacuar apresuradamente al personal de la embajada de la República de Armenia en Damasco. Sin embargo, para un país que apoyaba al régimen de Assad, que tiene estrechas relaciones con Irán y Rusia, tal posición parece comprensible.

Los temores de los armenios sirios se intensifican cuando recuerdan que algunos de los yihadistas en lo que hoy es Alepocomo mercenarios, "cazaron a los armenios en Azerbaiyán" no hace mucho tiempo. Si bien estos mercenarios, que cometieron atrocidades contra los armenios en 2020, se retiraron de las filas de una organización Pro turca llamada "ejército nacional sirio" que compite con la HST, los combatientes turcos en lo que hoy es Alepo, con su ideología pan-turca, representan una grave amenaza.

En respuesta a la crisis que surgió, el Katolikós de la Gran Casa de Cilicia, Aram I, asumió los costos de la entrega urgente de alimentos a las familias que habían perdido vitalidad debido a la depreciación del dinero, lo que, si bien es una iniciativa necesaria, no es suficiente ayuda 

¿Qué les espera a las comunidades armenias de Alepo que se instalaron allí inmediatamente después de los eventos de 1915, con su patrimonio invaluable, hogares culturales, iglesias, colegios y bibliotecas. ¿Cuál será el destino de los armenios de Kesab, el asentamiento armenio más antiguo fuera de su patria?

Contrariamente a las afirmaciones de las nuevas autoridades en Alepo y Damasco, los robos y saqueos ya han comenzado. En Damasco, por ejemplo, algunos barrios fueron saqueados los días 7 y 8 de diciembre, cuando comenzaron a circular noticias sobre el derrocamiento del régimen. La seguridad y la estabilidad se pondrán a prueba cuando las facciones en conflicto comiencen a chocar entre sí, obsesionadas con la manía de tomar el poder. Semejante escenario inspira temor en la población de que se repitan los incidentes posteriores a Saddam y que los cristianos se conviertan en blanco de ataques terroristas, secuestros, asesinatos y acoso contra las mujeres.

Siria está condenada a convertirse en el "epicentro de la yihad", atrayendo a miles de "reclutas" de diferentes partes del mundo, que se preparan para llevar a cabo su "hijra" ( migración de Mahoma de La Meca a la ciudad de Yatrib, después conocida como Medina, en el año 622).

Se espera que Ereván organice la evacuación de nuestros compatriotas, con el apoyo de la ONU y el refuerzo de los representantes diplomáticos que operan en Siria.