En la revista estadounidense "Newsweek", Hikmet Hajiyev, asesor de política exterior del presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, publicó un artículo en el que, tratando de justificar la negativa de Azerbaiyán a firmar un tratado de paz con Armenia, escribe:
"Aún quedan grandes obstáculos en el camino. El primero es la Constitución de Armenia, que exige la anexión de la región de Karabaj de Azerbaiyán, a Armenia. Esta demanda constitucional revanchista ha sido un obstáculo para la paz en el pasado. En 1996, el entonces presidente de Armenia se negó a firmar la declaración final de la cumbre de la OSCE, argumentando que la Constitución de Armenia no permite firmar un documento internacional que reconozca a Karabaj como parte del territorio de Azerbaiyán".
Los dichos de Hajiyev son otra falsedad de la propaganda militante azerbaiyana. En 1996, en Lisboa, el primer presidente de Armenia, Levon Ter-Petrosian, expresó dos veces la posición de Armenia con respecto al plan de solución del conflicto de Karabaj, ofrecioendo a Nagorno Karabaj el más alto estatus de autogobierno dentro de Azerbaiyán.
Al respecto mencionamos:
1. Ocurrió por primera vez en el plenario, cuando el presidente anunció. "En nuestra profunda convicción, si el problema de Karabaj se resuelve sobre la base de los principios propuestos por Azerbaiyán, la población de Nagorno Karabaj se enfrentará a la amenaza constante de genocidio o desplazamiento forzado. La experiencia de los pogromos antiarmenios en Sumgait (febrero de 1988), Kirovabad (noviembre de 1988) y Bakú (enero de 1990), así como la deportación de la población de 24 aldeas armenias en Karabaj (mayo-junio de 1991), muestra claramente que Azerbaiyán , a pesar de todas las garantías, no puede garantizar la seguridad de la población de Nagorno-Karabaj".
2. La segunda declaración de Levon Ter-Petrosian, fue registrada como el segundo apéndice del documento oficial de la Cumbre de Lisboa de la OSCE y justifica la aplicación del veto por parte de Armenia a la propuesta de solución del conflicto de Karabaj de la siguiente manera. "La declaración predetermina el estatus de Nagorno-Karabaj, contradiciendo la decisión del Consejo Ministerial de la OSCE, que reserva esta autoridad a la Conferencia del Grupo de Minsk, que debería convocarse después de alcanzar un acuerdo político".
3. Como hemos dicho muchas veces en el pasado, la Constitución no prevé para Armenia más fronteras que las reconocidas internacionalmente en 1991, lo que fue confirmado una vez más por la decisión del Tribunal Supremo de Armenia.
Así, Azerbaiyán presenta una evidente mentira a la comunidad internacional, intentando justificar el rechazo de la paz con Armenia con supuestos "obstáculos constitucionales". Es lamentable que un medio de comunicación tan serio como la revista "Newsweek" no haya verificado adecuadamente la autenticidad de las afirmaciones de Hajiyev.
Sin embargo, el verdadero problema no es esta mentira presentada por Azerbaiyán y fácilmente refutable si se desea. El problema está en la política infructuosa de Nikol Pashinian, quien estaba obligado a llamar la atención de la comunidad internacional y, en particular, de la revista Newsweek con una respuesta oficial de Armenia, refutando las mentiras de Azerbaiyán, e insistir en su publicación.
La diplomacia de Pashinian, sin embargo, hizo silencio ante la mentira azerbaiyana. Al hacerlo, de hecho, una vez más expresa su solidaridad con la política falsificadora llevada a cabo por Azerbaiyán.
Lo mismo se aplica a las afirmaciones de Azerbaiyán sobre el "genocidio" de Jodzhali. También en ese momento el partido Congreso Nacional Armenio, tuvo que asumir la función de las autoridades armenias y presentar pruebas que refutaran la falsa propaganda de Azerbaiyán.
Ereván, 23 de octubre