Tres cuestiones están relacionadas con el presente. a) la existencia de Armenia está en peligro, mientras continúen las negociaciones del tratado de paz con Azerbaiyán, b) no hay claridad sobre cómo el pueblo de Nagorno Karabaj, víctimas del genocidio, podrá regresar a su patria ancestral de manera segura, y c) 23 rehenes armenios siguen en las cárceles de Bakú.

En noviembre de este año, Azerbaiyán acogerá en Bakú la COP 29, la conferencia de las Naciones Unidas sobre el cambio climático, bajo el pretexto de "COP por la Paz". Si los rehenes armenios no son liberados y las delegaciones que asisten a la COP 29 ignoran el conflicto de Nagorno-Karabaj, el presidente Aliyev tendrá una poderosa excusa para promover su ambición geopolítica de conquistar toda Armenia.

Semejante escenario no sólo negará el genocidio de Nagorno Karabaj y condenará a los armenios mantenidos como rehenes a muchos años de prisión, sino que empujará a toda la comunidad armenia al olvido del pasado y fortalecerá aún más la amenaza a la propia Armenia.

Las autoridades legales de Armenia están llevando a cabo negociaciones muy difíciles. Los armenios, en Armenia o en la diáspora, y personas como yo, que están ocupadas y preocupadas por los genocidios y las guerras, debemos respetar los esfuerzos realizados y crear conciencia sobre los problemas mencionados de común acuerdo, para que sea posible proteger a ambos pueblos y al país.

Afortunadamente esto ya está sucediendo. Los armenios han iniciado una campaña en todo el mundo. El 23 de agosto, el presidente de lacentral de la Unión General Armenia de Beneficendia, Berdj Setrakian, apeló al Secretario de Estado, exigiendo la liberación de todos los armenios encarcelados en Azerbaiyán. Apreció los esfuerzos de Estados Unidos, pero expresó su preocupación sobre que las "palabras de Blinken seguirán siendo el sonido de un muro dialéctico y seguirán siendo ignoradas".

Durante el mes pasado, miles de personas de más de 30 países, muchas de ellas con raíces armenias, se unieron en foros digitales y redes sociales con los mismos hashtags: #COP29, #StopGreenwashGenocide, #FreeArmenianHostages y #FreePoliticalPrisoners. Artistas como Serzh Tankian, organizaciones armenias e internacionales (Comité Nacional Armenio de América, Solidaridad Cristiana Internacional y Asamblea Armenia de América, LIBERTAS en Francia, etc.) expresaron la misma idea.

#StopGreenwashGenocide y #FreeArmenianHostages se convirtieron en los 2 hashtags principales en Twitter (ahora X) relacionados con la COP 29. Además de la campaña en línea, se llevaron a cabo protestas desde Ereván hasta Canadá exigiendo la liberación de los rehenes armenios encarcelados en Bakú.

Ahora es el momento de ampliar este movimiento y llamar la atención sobre el problema de quienes configuran el destino del mundo. Los armenios no son las únicas víctimas de Aliyev. Aliyev daña a todo el medio ambiente, a los ciudadanos de Azerbaiyán y a los parlamentarios europeos.

Azerbaiyán, rico en combustibles fósiles, está emergiendo como un país líder en los esfuerzos globales para combatir el cambio climático. Mientras tanto, el gobierno del país oprime sin piedad a periodistas, investigadores y a todo disidente dentro de sus fronteras. Hace apenas unos días, esas autoridades prohibieron la entrada a Azerbaiyán a 76 enviados europeos de 26 países, que habían expuesto la corrupción del país. Durante una visita reciente a Buenos Aires, conocí a jóvenes que comprendieron que tales medidas estaban arruinando su futuro y estaban decididos a unirse a la campaña de TikTok de sus pares.

El siguiente paso debería ser pedir a los delegados de la COP 29 que alcen sus voces sobre las cuestiones mencionadas, incluido el lavado de los ingresos del combustible por parte de Aliyev, el genocidio de Nagorno Karabaj, la complicidad con la corrupción de los sistemas políticos europeo y estadounidense, así como los presos políticos de los armenios en Bakú.

Me alegra recibir una invitación de Su Santidad Karekin II y del Centro "Verdad y Justicia" para visitar Armenia el 9 de septiembre. Será una oportunidad única para reunirse con los representantes de la sociedad civil armenia y desarrollar juntos una estrategia común. Hasta entonces, armenios, salvemos a Armenia y conduzcamos al mundo hacia una COP 29 verdaderamente pacífica.