Al menos no veo la finalización del movimiento "Tavush por la Patria" de la misma manera que el líder del movimiento, porque los mensajes (el proceso de impeachment o la renuncia voluntaria de Nikol Pashinyan) están descartados.
La única manera puede ser fortaleciendo el movimiento, es decir, reunir diez veces más gente en la calle. Esta opinión fue expresada por el politólogo Armen Baghdasarian en una entrevista con el periodista de Azg.am.
Sin embargo, según nuestro interlocutor, esto sólo será posible si el movimiento presenta planes concretos y anuncia lo que va a hacer después del cambio de poder, en lugar de hacer declaraciones generales como "La verdad vencerá a la mentira" o "Los blancos vencerán al negro."
"Estas son simplemente hermosas palabras, y hasta que no haya un plan, no creo que haya una consolidación pública en torno a las palabras.
Verá, las autoridades actuales se refieren constantemente a las elecciones de 2021, dicen que han recibido el mandato del pueblo. Pero el régimen fracasó porque llegó al poder en 2021 con otras consignas: desocupación de Hadrut y Shushi, secesión de Artsaj en aras de la salvación, promesa de Armenia de ser garante de la seguridad de la República de Artsaj, etc. Pero el gobierno de la RA no cumplió ninguna de esas promesas, es decir, fracasó. y si fracasó, debería irse", afirmó Armen Baghdasarian.
Según el politólogo, la oposición de Armenia, que se presentó en el parlamento con la promesa de destituir al poder, también fracasó. Pero como no lo logró, significa que la oposición también ha fracasado.
"Ambos no cumplieron sus promesas, ambos fracasaron completamente y, como resultado de ambos fracasos, Armenia se encuentra hoy en esta situación", subrayó el politólogo.
Al mismo tiempo, Armen Baghdasarian señaló que, sinceramente, no comprende por qué la oposición parlamentaria conserva los mandatos.
"En otras palabras, debería haber una conversación sobre el fracaso con la sociedad. Si una de las partes no quiere admitir su fracaso, sino que, por el contrario, cada una acusa a la otra de fracasar, nos encontramos en una situación en la que las acusaciones de ambas partes son ciertas.
Resulta que las partes carecen de honestidad y voluntad política para confesar la verdad y aceptar su culpa. Y mientras no se produzca esa conversación honesta, tendremos una lucha de perdedores contra perdedores sin resultados", resumió nuestro interlocutor