Las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos serán difíciles debido a las tensiones existentes, la discordia pública y las acciones legales contra el expresidente Donald Trump.

Estos factores sugieren que ambos partidos buscarán vigorosamente el voto de cada elector, asegurando que cada voto sea debidamente contado. En este contexto, los votos armenios son significativos y están repartidos en diferentes estados.

Si bien los votos en California y Massachusetts pueden no influir mucho en el resultado debido a su habitual estatus de estado azul, los votos armenios en estados indecisos como Nevada, Michigan y Wisconsin pueden tener una importancia sustancial durante el período preelectoral. En este sentido, los votos armenios en estos estados son vitales tanto para los republicanos como para los demócratas, por lo que es esencial comprender la postura de la comunidad armenia sobre estas elecciones.

Ciertamente, no hay una respuesta clara sobre a quién elegirán los votantes armenios, ya que sopesan las prioridades de Armenia junto con sus propias visiones para el futuro en Estados Unidos. Es evidente que los votos armenios se dividirán entre republicanos y demócratas.

A pesar de ello, la comunidad armenia y numerosas organizaciones han adoptado una postura clara. Tras la limpieza étnica de Artsaj, han intensificado sus críticas a la administración Biden, argumentando que Biden no apoyó adecuadamente a Armenia y Artsaj, no responsabilizó a Aliyev y se abstuvo de armar a Azerbaiyán.

Además de la administración en general, el secretario de Estado, Antony Blinken, y la directora de USAID, Samantha Power, son objeto de serias críticas. Sin embargo, esto no implica que los votos armenios vayan simplemente a parar a Trump, ya que también existe la opinión en la diáspora armenia de que Trump estaba demasiado ocupado con su campaña preelectoral antes de las elecciones de 2020 como para prestar suficiente atención a la agresión azerbaiyana contra Artsaj. en septiembre de 2020. No tomó ninguna medida significativa para proteger los intereses armenios antes de entregar el cargo a Biden en enero de 2021, lo que sin duda es una perspectiva válida que existe dentro de la comunidad armenia.

Al mismo tiempo, hay un punto de vista que aboga por la participación en las elecciones y respalda a un candidato independiente como Robert Kennedy, bien versado en asuntos armenios y que mantiene una fuerte postura pro-armenia. Si bien sus posibilidades de ganar pueden ser escasas, un candidato independiente podría perturbar significativamente a los favoritos, como lo hizo el independiente Ross Perot en 1992 durante las elecciones entre George H. Bush y Bill Clinton.

Para determinar las inclinaciones electorales de la diáspora armenia en Estados Unidos, es imperativo profundizar en sus prioridades, su perspectiva sobre el futuro de Armenia y su participación en las esferas políticas estadounidenses.

Ciertamente, no hay una respuesta definitiva sobre las preferencias electorales de la diáspora armenia en Estados Unidos debido a su naturaleza diversa y evolución histórica. La composición de la diáspora abarca varios períodos, desde formaciones anteriores al genocidio hasta migraciones posteriores al genocidio, afluencias de la era soviética y llegadas continuas posteriores a la independencia armenia. Esta comunidad incluye individuos de Armenia, sobrevivientes de los pogromos de Bakú, armenios de Siria, Líbano, Rusia, Irán, Turquía y otras regiones.

En consecuencia, predecir sus intenciones electorales sigue siendo complejo. Sin embargo, es evidente que los votantes armenio-estadounidenses priorizan sus puntos de vista sobre Armenia y la política estadounidense hacia el país en su proceso final de toma de decisiones.