La visita de Nikol Pashinian a Moscú tuvo algunos matices interesantes...

Pashinian no asistió a la ceremonia de toma de posesión de Vladimir Putin el 7 de mayo, alegando falta de invitación.

El 8 de mayo participó en Moscú de la reunión de líderes de la Unión Económica Euroasiática (UEEA). Sin embargo, en la madrugada del 9 de mayo regresó a Ereván, sin sumarse al desfile previsto en la Plaza Roja para celebrar el día de la victoria de la Gran Guerra Patria (Segunda Guerra Mundial) de 1941-1945, a pesar de la presencia de los presidentes y líderes de otros países.

Durante su estancia en Moscú, Pashinian presidió la sesión ordinaria del Consejo Económico Supremo Euroasiático como parte de la reunión de líderes de la UEEA. Poco después de la sesión, mantuvo una reunión tête-à-tête con el presidente ruso Vladimir Putin, que fue la parte más crucial de su viaje, considerando las recientes y tensas relaciones entre Ereván y Moscú. Según el sitio web oficial del gobierno armenio, Pashinian mencionó que las dos partes discutieron los temas cruciales de las relaciones bilaterales y asuntos regionales.

La declaración oficial del presidente ruso fue más o menos similar al comunicado de prensa armenio. Pero fue sólo una parte oficial de la reunión.

Dada la complejidad de las relaciones entre Armenia y Rusia, los armenios esperaban ansiosamente más detalles sobre estas reuniones, que inicialmente fueron reportadas por los medios pro-Pashinian. Según estas fuentes, Pashinian insistió en Moscú en que todas las fuerzas rusas desplegadas en Tavush, Syunik, Vayots Dzor y otras regiones armenias durante o después de la guerra de 44 días debían retirarse. Además, según informes de los medios pro-Pashinian, el personal ruso debía ser reubicado del aeropuerto internacional de Zvartnots.

Horas más tarde, el secretario de prensa del presidente ruso Putin, comentó sobre la reunión, mencionando que “De hecho, debido a que las condiciones han cambiado, Pashinian y Putin estuvieron de acuerdo en ese tema”. El portavoz Peskov añadió que, a petición de la parte armenia, los guardias fronterizos rusos permanecerán en la frontera con Irán y Turquía.

Más allá de la tensión verbal, Armenia no ha tomado ninguna medida directamente contra Rusia o los intereses rusos. A pesar de las discusiones iniciales sobre la salida de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) liderada por Rusia, Armenia no ha solicitado formalmente su alejamiento, que requiere de un aviso de seis meses de antelación. Ereván mencionó congelar su membresía en la OTSC, pero los estatutos de la organización no permiten la congelación de miembros. Armenia también declaró que no pagará la cuota de membresía de la OTSC, que es un pequeño costo administrativo para financiar el personal de la OTSC.

En cuanto al aspecto económico de las relaciones, están experimentando un crecimiento y Rusia sigue siendo el principal socio económico de Armenia. El comercio entre Armenia y Rusia, así como entre Armenia y la UEEA, está experimentando un aumento en el número y una cooperación de alto nivel, como lo observaron con satisfacción Putin y Pashinian durante su reciente reunión. Es obvio que Armenia no tiene planes de abandonar la UEEA, como se discute a menudo en Armenia. Ereván está obligado a avisar con un año de antelación según los estatutos de la UEEA, algo que no ha hecho hasta ahora. A pesar de la tensión exterior antes mencionada, Armenia de hecho no parece lista o capaz de salir de la esfera de influencia de Rusia.