Si las elecciones anticipadas no curan las heridas, establecen legitimidad y aseguran un mandato de mayoría, seguirán siendo un ejercicio inútil.

Armenia y Artsaj recibieron un golpe histórico como resultado de la guerra de 44 días. Si las superpotencias regionales apoyaron esta terrible catástrofe, tampoco es insignificante la responsabilidad del régimen gobernante, cuya miopía militar, inexperiencia diplomática e incompetencia administrativa se convirtieron en señales de esta gran derrota.

Cualquier estadista digno o ciudadano consciente de esta situación catastrófica, lógicamente pediría la renuncia del Primer Ministro ya que la situación hoy, es más complicada que en el período anterior a la guerra.

Si pudimos firmar un alto el fuego con el enemigo, nosotros, como Nación, debemos encontrar la fuerza para dar fin al ataque entre nosotros, frenar la polarización  ampliada por Internet y la prensa, y poner fin a la agresión continua y amenazas inexpresables.

Es hora de poner fin a las etiquetas, viejo o nuevo, blanco o negro, corrupto o legítimo, y buscar sólo valores en todos los frentes: político, científico, militar y económico. Formar una administración que copartícipe y sea solidaria a nivel nacional, agrupando mediante la consolidación de valores a los más capacitados y sólo así llamar a elecciones extraordinarias.

En el actual laberinto político-lingüístico deben encontrarse estadistas que comprendan y dispongan los pasos a seguir de acuerdo a la ley y "resolver dentro de la ley" y, si es necesario, recurrir a las elecciones.

El objetivo de las elecciones anticipadas debería ser curar las heridas de Armenia y restaurar el país. No para confirmar qué grupo puede formar mayoría y derrotar al oponente u oponentes. Lo que se perdió no se puede restituir con las circunstancias de hoy. Lo que sí es posible es proteger al resto.

Ante esta difícil situación, los editores y directores de la prensa Ramgavar Azadagan de todo el mundo quisieran recordar a nuestro pueblo, Armenia, Artsaj y la Diáspora, que el actual presidente Armen Sarkissian y los cinco expresidentes de Armenia y Artsaj ha señalado el camino hacia la unidad nacional.

Basta continuar y completar esa unidad.

Nuestros 5,000 jóvenes mártires ya no votarán en elecciones anticipadas.

¿En qué medida es prioritario participar en las elecciones para los diez mil discapacitados y sus allegados?

El país está paralizado y la gran mayoría de la ciudadanía permanecerá indiferente ante las elecciones, al no encontrar una propuesta de administración que corresponda a la gravedad del momento.

Es posible que sólo una minoría del electorado participe en la votación y una mayoría en esa minoría teóricamente podría elegir un régimen que reclamaría legitimidad, pero no autoridad y poder para gobernar el país.

El actual gobierno es el responsable del fracaso presente. Su reelección no puede dar más de lo que dio en mejores condiciones.

Celebrar elecciones anticipadas para sacar a la Patria de la catástrofe de hoy sin establecer pautas claras para el futuro,  será en vano.

Asociación de Organizaciones de Prensa Demócrata Liberales Armenias.

"Azg" (Ereván), "Abaka" (Montreal), "Arev" (El Cairo), Zartonk (Beirut), Nor Ashharj (Atenas), Baikar (Boston), Sardarabad (Buenos Aires), Armenian Mirror Spectator (Boston)