El 2020 fue un año de aquellos que seguramente no se olvidarán.
Para nosotros los armenios de este siglo fue aún más complejo, sorprendente y doloroso.
Hoy tenemos el honor de entrevistar a la Señora Embajadora de la República de Armenia, Estera Mkrtumyan quien con mucha amabilidad accedió a ella.
1.-Hoy, en enero de 2021, tenemos miles de acontecimientos que nos atropellaron desde el 27 de septiembre de 2020, sería muy fácil hablar con el diario de varios lunes… ¿qué nos puede decir de la guerra?
- De la guerra solo puedo decir que toda guerra es un hecho lamentable. Es el resultado de que los seres humanos que tenemos a cargo la conducción de los países no podemos llegar a acuerdos que puedan evitar la muerte y la destrucción. La humanidad viene desarrollando desde hace siglos diversos métodos para evitar el extremo del sacrificio de las vidas de militares y civiles. Pareciera que sigue siendo inevitable. Los organismos internacionales se han creado para asegurar soluciones pacíficas a los conflictos.
2.- ¿Cómo sintió a la diáspora armenia durante el desarrollo de los acontecimientos?
- La sentí preocupada y solidaria. Empeñada en la defensa de los derechos de los armenios de Artsaj y de la Madre Patria. Comprometida con la paz y con el proceso de negociaciones pacíficas. Tratando de concientizar a sus países de residencia.
3.- ¿Qué opina de la relación Armenia-Diáspora? ¿Piensa que se estableció un nuevo vínculo durante la guerra?
- La relación Armenia-Diáspora no es una circunstancia, es un proceso en constante desarrollo. Armenia es un país, un estado, con sus estructuras características y su población definida. La diáspora es heterogénea en su origen, su proceso de formación y sus estructuras. El conocimiento mutuo es indispensable para una relación más fluida y exitosa. La guerra es siempre movilizante y despierta sentimientos adormecidos. Es tarea de todos que la toma de conciencia no se extinga.
4.- Volviendo a nuestra comunidad, la de Argentina, el concepto unánime fue que nuestra Embajadora tuvo una destacada labor en el campo periodístico, tanto televisiva como radial, con un desempeño brillante ante periodistas afamados de la talla de Jorge Lanata, por ejemplo. ¿Ese accionar, en casi todos los medios nacionales, logró instalar en la comunidad argentina un tema desconocido por lo lejano territorialmente e inadmisible como la guerra?
- Se logró trascender a base de dedicación, insistencia y sacrificio. Los medios nacionales no son fáciles. No me corresponde evaluar mi desempeño. Merced a la incansable labor de la comunidad armenia, las sociedades argentina y uruguaya son las más informadas acerca de las reivindicaciones armenias en toda Latinoamérica. La cuestión de Nagorno-Karabaj es particularmente compleja y nunca podemos afirmar que ha sido transmitida en forma exitosa y satisfactoria. Se entrecruzan conceptos y valores difíciles de transmitir para las mentalidades de los países de Latinoamérica. Por otra parte, el concepto de la guerra y de las disputas territoriales y de libre determinación no está en la agenda cotidiana. De cualquier forma, la opinión pública nacional es generalmente comprensiva y solidaria para con la posición armenia, que es particularmente pacífica.
5.- La comunidad armenia de Sudamérica se aunó y pudo organizar más de una acción conjunta coordinada, todos sacaron de adentro ese ser armenio que a veces parece dormido, ¿qué nos puede decir?
- Siempre es positivo que afloren sentimientos legítimos que a veces parecen adormecidos. Nuestra historia varias veces milenaria, nuestra cultura, nuestras virtudes intelectuales y la trayectoria de nuestro pueblo contienen elementos que justifican acciones conjuntas permanentes para mantenernos en alerta y poder sobrellevar situaciones límites.
6.- ¿Y en especial, de la de Buenos Aires? Usted hace más de 7 años que está en la Argentina, ¿se imaginó que todas las instituciones juntas nucleadas en IARA podrían hacer tanto?
- En los siete años que llevo en la Argentina como funcionaria y embajadora siempre valoré en alto grado la contribución de la comunidad armenia en su apoyo a nuestra representación y por su contribución a la difusión de los valores culturales y espirituales de nuestro pueblo. La trayectoria y lo realizado merecen la consideración y la valoración de las autoridades de Armenia y Artsaj.
7.-Si nos guiamos por el resultado de la guerra, el sabor amargo y el dolor a flor de piel que cada uno siente, ese duelo interno que experimentamos en conjunto, nos haría pensar que todo fue inútil… ¿Usted qué opina?
- Creo que sería una afrenta a los sacrificios, las privaciones y las víctimas pensar que todo fue inútil. Solo con el tiempo y la consideración de los estrategas, expertos, politólogos e historiadores podremos hacer una evaluación serena y reflexiva de los acontecimientos ocurridos.
8.- ¿Si bien el alto el fuego se hizo efectivo la última vez, usted cree que estas condiciones serán duraderas?
- La declaración del 9 de noviembre constituyó un cese de hostilidades condicionado por la presencia de tropas de paz de la Federación de Rusia, país que es co-presidente del Grupo de Minsk, junto con Francia y Estados Unidos. La duración de las condiciones actuales dependerá de la voluntad de las partes. En estos momentos es vital hallar una solución viable a las cuestiones humanitarias. Armenia y Artsaj son proclives a contribuir con las perspectivas de paz. Azerbaiyán y Turquía no parecen muy decididas a contribuir al respeto de los frágiles acuerdos. Rusia despliega esfuerzos por acercar a las partes. Uno de los interrogantes más importantes es prever qué actitud adoptarán los otros dos co-presidentes del Grupo de Minsk.
9.- ¿Cómo seguimos en la diáspora con los trabajos de reconocimiento de la República de Artsaj?
- La diáspora armenia es fruto de orígenes y formaciones diversas. Es heterogénea por su génesis y por su desarrollo. Debe autodefinir su rol en función de sus potencialidades, su concientización y su predisposición a la labor colectiva. La presencia armenia en los cinco continentes es de por sí un factor positivo en la concreción de nuestros objetivos. La dirigencia carga con la responsabilidad de transmitir el legado, el mandato y los imperativos actuales. El seguimiento permanente de los acontecimientos es fundamental para pensar en las tareas prioritarias. La incertidumbre de estos tiempos con respecto al estatus definitivo de nuestros reclamos y aspiraciones se irá disipando y se pondrán en evidencia las necesidades del momento. Evitar nuevos derramamientos de sangre aparece como fundamental.
10.- Por último, cuando fue destinada a la Argentina, ¿cuál fue su primera reacción?
- Mi reacción fue positiva, como todos los anteriores desafíos de mi carrera profesional. Mi conocimiento académico del idioma español me producía una predisposición muy favorable. La cordialidad de la delegación oficial argentina en Ereván con motivo de la visita oficial del Presidente Menem en 1998 también había contribuido a mis perspectivas muy positivas. Además, sabía de las características deslumbrantes de esta ciudad de Buenos Aires y de la vida armenia activa en el seno de la colectividad, muy apreciada por la sociedad argentina. Mis previsiones se vieron confirmadas…
11.- ¿Qué resumen puede hacer de todos estos años?
- Fundamentalmente el de haber contribuido a fortalecer la presencia de mi país en la Argentina y en otros cuatro países latinoamericanos hispanoparlantes. La Argentina, Uruguay, Chile, Paraguay y Perú tienen rasgos comunes que armonizan con muchas y considerables diferencias. Las dimensiones de las comunidades armenias y su arraigo en esos estados marcan grados de diversidad que hay que trasponer mediante un lenguaje claro y apropiado que transmita nuestras vivencias y nuestro aporte a la relación bilateral. Los documentos que jalonan la base jurídica de nuestras relaciones requieren el permanente abastecimiento de hechos concretos que hagan aumentar el interés recíproco de las partes. Latinoamérica es un área favorable para la comprensión y difusión de los derechos armenios y fundamentalmente para la solución pacífica de los conflictos y el ejercicio del derecho de libre determinación de Artsaj, dado que la propia existencia de los estados sudamericanos es consecuencia de ese ejercicio.
Muchas gracias!