Como todos sabemos, el fútbol es mucho más que una pelota rodando por el verde césped. Es un deporte que trasciende fronteras y religiones. En Argentina, particularmente, está arraigado en nuestra esencia y ADN. Hoy entrevistamos a Marcelo Papazian, Vocal Titular y del Departamento de Marketing de Deportivo Armenio, quien nos va a contar su historia en la institución y cómo se las ingenia para poner al club en lo más alto. Una causa, un propósito y valores, unidos por el amor y la pasión.

Fue algo que se fue dando con el tiempo. Arrancamos primero colaborando con todo tipo de cuestiones en el Club, y al ver que me interesaba mucho, me fui volcando para el lado de marketing.

 

No estuve siempre relacionado con el marketing, pero es algo que uno ya lo siente. Te vas dando cuenta cuando empezás a pensar diferente. Por ejemplo, vas a diferentes canchas y mientras todos ven el partido, vos prestas atención a los carteles publicitarios, camisetas, marcas, diseños etc.

 

Siempre estuve relacionado con Deportivo Armenio, pero no con el marketing. Empecé casi sin conocimientos y luego me empecé a preparar un poco mas por medio de diplomaturas, cursos y demás cosas relacionadas al marketing deportivo. Allí, conoces un montón de gente y hoy en días todos mis ex profesores son casi amigos.

 

Poder  canalizar ideas, llevarlas a cabo y que estas terminen beneficiando a un Club. Todo el tiempo salen cosas nuevas y se aprende. Tratras de imaginar y luego transformarlo en una realidad.

 

 Me cambió mucho la perspectiva cuando comencé a entender que los hinchas, socios y seguidores, son clientes. Claro, no sólo clientes sino que son amigos/clientes. Hay que ser cuidadoso porque esto es todo relacionado con pasión, aunque debo decir que por lo menos en Armenio no me costó, ya que soy muy apasionado del club.

Primero creo que es clave y fundamental entender la idiosincrasia de  cada Club. Todos son un mundo diferente, donde tenés diferentes caminos por explorar y formas de beneficiarlo. Es imposible caer en un club y querer hacer cosas sin antes entender que hay detrás de cada uno, cómo se manejan, cuáles son los pro y los contras, y qué se puede explotar y qué no.

 

En el ascenso siempre obviamente es mucho más difícil. La difusión es poca, las oportunidades también, pero siempre hay diferentes estrategias que uno puede realizar para lograr algún ingreso. Las formas de realizar marketing en clubes pueden ser muchas, pero el fin es uno solo y es el ingreso de dinero.

 

Si bien ahora volví a meterme de lleno en Armenio, tuve un paso bastante bueno en Yupanqui hasta antes de la pandemia.

 

Fue un reto grande. Un día estaba un poco aburrido y necesitaba un poco de acción, agarré la computadora y me puse a ver qué clubes de la C y de la D tenía cerca. Elegí Yupanqui y llame al presidente y le dije: “Hola Dante, soy Marcelo de Deportivo Armenio, ¿ustedes tienen departamento de marketing en el club?” Él me respondió que no, y ahí comencé. Un plan diferente, viendo los pro o las contras de esa institución y finalmente, logramos hacer muchísimas cosas. Considero que fue realmente exitoso y bueno. Innovamos en redes sociales, nos metimos con cuentas de influencers, llenamos el club de sponsors, y un montón de cosas más. Como mencioné antes, para poder hacer eso tuve que primero mentalizarme y pensar como hincha, haciéndome socio del club, yendo a ver los partidos y estando mucho tiempo en la sede.

 

Mi plan fue el siguiente: Un equipo que milita en la D, sin estadio propio, jugando de local entre semana  a 40km de distancia de su sede, era imposible intentar hacer que la gente vaya, se asocie o se entusiasme. Entonces ahí ejecute mi plan, que lo aprendí de un profe mío, Claudio Destefano: Hacer un club virtual. No importaba el resultado ni cuándo ni dónde jugará Yupanqui. Comenzamos a relacionarnos con influencers de redes sociales, sortear camisetas, armados videos y varias cosas más. Fue difícil y no siempre todo fue positivo pero, en líneas generales, yo siento que cumplí y le desmotré que es posible hacer marketing en un club de esta categoría.

 

Fue también muy gratificante cuando antes de la pandemia se supo que el Club Claypole jugaría frente a Boca por la Copa Argentina, me contactaron para colaborar en el tema, que fue comandado por Claudio Destefano, quien también es el responsable de marketing del Club Atlas.

 

Por más pequeño que sea, es necesario tener un departamento de marketing.  Antes en el Club no había nada parecido ni nadie que se ocupara del tema y desde que lo inicié, empezó a ser una parte importante en la vida cotidiana. Igualmente, todavía queda mucho por hacer.

 

Puedo decir que lo que tiene Deportivo Armenio de mí es la llegada con la gente. En la comunidad armenia soy una marca, soy MARCELO ARMENIO; donde vas me conocen, desde el socio fundador número 1, hasta el posible hincha que acaba de nacer en este mismo momento. Estuve en varias instituciones, también participo en programas de radio, hasta de TV y en medios gráficos.

 

En cuanto a la impronta que le di, fue la de comenzar a figurar, estar y participar. Durante muchos años el Club estuvo como apartado de todo y quizás simplemente no había nadie que se ocupara de difundirlo. Cuando llegué, trate de cambiar todo eso, empezar a tener contactos con todos los medios de comunicación de la comunidad, sortear camisetas en todos lados, participar de marchas como por ejemplo las de los 24 de abril, cuando todos los años marchamos a la embajada de Turquía pidiendo el reconocimiento del genocidio. Después organicé cenar mensuales en restoranes armenios donde convocábamos mucha gente. Creo que con todo ese tipo de cosas la gente vuelve a ver de que el club está vivo y sigue de pié. Hoy en día, y gracias en parte a todo eso, Armenio está mucho más metido en la comunidad.

 

Fue algo muy importante, no sólo conmemorar 1 año más del genocidio armenio (106) también sentía que había que comunicar sobre lo acontecido en la última guerra que se sufrió el año pasado contra Azerbaiyan y Turquía. Si bien creo que esto no fue netamente “hacer marketing”, sino mas bien poder comunicar y activar el real propósito por el cual que fundado el club, difundir la causa armenia por medio de una pelota de fútbol.

 

De esa forma surgió y luego comenzamos a darle forma. Para comunicar esto, necesitaba un diseñador. No podía ser un diseñador cualquiera, tenía que ser armenio, apasionado por el fútbol y que conozca bien el club. Si no cumplía todo eso, no me servía. Luego, por medio de un contacto, llegué a Ari Hadjian, un argentino que vive en Armenia. Le dije: “Soy Marcelo del departamento de Armenio y tengo una propuesta para hacerte. Necesito que diseñes una camiseta especial que usará el club por única vez un solo partido. Esta camiseta tiene que comunicar sobre los 106 años y también sobre lo acontecido en la guerra de Nagorno Karabakh. Tenemos 2 días para hacerla y no acepto un NO como respuesta. Esto no te lo voy a poder contribuir monetariamente porque estás lejos, pero vas a llevar la gloria de por vida, tu nombre va a salir en todos lados y no te lo vas a olvidar nunca más”. Todo eso fue mi mensaje de WhatsApp presentándome. A los pocos minutos me respodió: “wooouuuu”, y luego pusimos manos a la obra.

 

De esta manera, posicionamos al Club en lo más alto y lo más importante es que por medio de la pelota, pudimos comunicar todo esto. Fue un éxito y yo creo que Ari lo va a llevar en su corazón de por vida.

 

Es difícil en estos momentos tener planes, creo que lo vamos a ir viendo sobre la marcha. En principio, estoy armando una línea vintage de indumentaria porque creo que podemos puede tener buena llegada con los hinchas y posibles compradores que no sean sólo los habituales.

 

Hay que ver oportunidades y momentos. Por más mínimo que sea, si se genera un ingreso, entonces es un ÉXITO.