"Desde la Santa Sede de Etchmiadzin, centro espiritual de todos los armenios, enviamos nuestras bendiciones y mejores deseos a nuestro pueblo de todo el mundo, con motivo del Día de la República.
Los acontecimientos históricos de las heroicas batallas de mayo, fueron de importancia fundamental en la restauración del Estado armenio, la creación de la Primera República de Armenia y el renacimiento de nuestra vida nacional.
Habiendo sobrevivido a la terrible tragedia del genocidio armenio, nuestro pueblo libró una lucha de vida o muerte y obtuvo gloriosas victorias.
En estos días, cuando nos enfrentamos a graves amenazas a nuestra seguridad y a cuestiones ontológicas, es imperativo que nos mantengamos unidos, indomables y firmes frente a los desafíos internos y externos que invaden nuestra vida nacional.
Queridos hermanos, con motivo del Día de la República, el Patriarca desea que en aras de establecer la paz y la existencia digna en nuestra vida cotidiana, con compromiso decidido y amor a nuestra patria, superemos las calamidades y pruebas que nos han sucedido y construyamos un Estado fuerte y seguro.
Alejemos la indiferencia destructiva, disipemos la atmósfera de enemistad y odio, para establecer la seguridad y la paz en nuestras vidas, con un espíritu de unidad, esperanzador y poderoso.
Oremos para que el Señor Celestial preserve y ayude a nuestro pueblo a mantener fírmemente nuestra libertad divina y a nuestro Estado independiente fuertes, y a nuestra preciada Patria con potencial nacional, para prosperar y florecer".