Víspera de la fiesta de la gloriosa resurrección de nuestro Señor Jesucristo o la fiesta de Pascua, liturgia divina a la luz de las velas El Sábado Santo, se conmemora la destrucción del infierno de Cristo y su liberación de las almas justas.
Según la tradición de la Iglesia, el nuevo día comienza después del servicio nocturno.
Se celebra una tarde de Liturgia Divina, al final de la cual se proclama la buena noticia de la gloriosa resurrección del Salvador:
“Cristo ha resucitado de entre los muertos; ¡Bendita sea la resurrección de Cristo!”.
De este modo concluye el período de la Gran Cuaresma.
La fiesta de la Gloriosa Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo o la Fiesta de Pascua comienza en la víspera y continúa después de la medianoche.
En la víspera se celebra una solemne liturgia divina a la luz de las velas. Después de la conclusión de la ceremonia, los fieles reunidos se dan la bienvenida en ocasión de la Gloriosa Resurrección de Cristo transmitiendo la gran noticia:
"Cristo ha resucitado de los muertos" y reciben la respuesta:
"Bienaventurada la resurrección de Cristo" y encienden velas simbolizando la Luz que Cristo trajo al mundo.
La Divina Liturgia celebrada en la víspera es el final de la Gran Cuaresma y el comienzo de las ceremonias festivas.