El presidente de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE), Teodoros Roussopoulos, respondió a la declaración del Ministro de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán de que algunos miembros de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE) serán considerados "personas indeseables" en el país.
"Esto es una señal dolorosa, que sólo complica la situación actual de Azerbaiyán en el Consejo de Europa.
Los estados miembros están obligados a cumplir con los estándares de la democracia. Poner en la lista negra a quienes votaron según su conciencia sólo puede tener el resultado contrario", afirmó Roussopoulos, según informó el servicio de prensa de PACE.
Frank Schwabe, jefe de la delegación alemana en la PACE, escribió en las redes sociales: "En las democracias, la prohibición de entrada sólo se aplica a extremistas y delincuentes graves."
"Supongo que la prohibición de mi entrada a Azerbaiyán es más bien un signo de dictadura absoluta", escribió el eurodiputado.