El ciudadano azerbaiyano Kamil Zeynalli fue detenido el martes 20 de febrero por la tarde, en el aeropuerto Domodedovo de Moscú, antes de abordar el vuelo Moscú-Bakú, a petición de Armenia.
Posteriormente, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Azerbaiyán anunció que el asunto "está bajo la supervisión de la embajada de Azerbaiyán en Rusia".
Su abogado, Alekper Garayev, había señalado que Armenia había iniciado la búsqueda de Zeynalli por cargos graves, pero el Estado ruso mostró "humanismo".
"Gracias a la ayuda y a la perseverancia del Estado azerbaiyano, Kamil Zeynalli es libre y regresará hoy a Azerbaiyán", expresó Garayev el miércoles.
Kamil Zeynalli fue declarado buscado por Armenia, acusado de "asesinato", sospechoso de decapitar a un anciano armenio residente en Hadrut, Nagorno-Karabaj durante la guerra de 44 días en 2020.
Y el jueves lo recibieron con flores en el aeropuerto de Bakú.
Según el embajador de Azerbaiyán en Rusia, la embajada logró convencer a la parte rusa que las acusaciones presentadas por los órganos de investigación de Armenia eran "infundadas" y asi lograr la liberación del ciudadano de Azerbaiyán y su regreso a su patria luego de enormes esfuerzos y negociaciones intensas.
Tatevik Hayrapetian, ex diputado de la Asamblea Nacional y académico en temas azerbaiyanos, también abordó el tema y escribió:
"Como era de esperar, otro asesino que decapitó a un armenio es glorificado en el vecino Azerbaiyán. En ese estado, matar a un armenio, decapitar a un armenio es un acto heroico... En el vídeo, el asesino agradece especialmente a Aliyev su intervención. Han pasado veinte años desde el asesinato de Margarian, pero nada ha cambiado en la mente de ese Estado y de sus dirigentes".