Los armenios en Jerusalén temen que su pequeña pero unida comunidad, no sobreviva si pierden el Jardín de las Vacas en el Barrio Armenio. Muchos armenios viven aquí y se mudaron hace 100 años, después del genocidio armenio, escribe Al Jazeera.

Al descubrir que los colonos israelíes habían regresado arrasando el área cercana a su residencia en el Barrio Armenio, Garo Nalbandian, un fotógrafo profesional de 80 años, participó activamente en la protesta en el área denominada Jardín de las Vacas.

El 26 de octubre, el Patriarcado de Jerusalén de la Iglesia Apostólica Armenia, reveló su decisión de anular un acuerdo de arrendamiento de tierras firmado en el 2021, no divulgado anteriormente, con una empresa de bienes raíces que se cree está asociada con los intereses de dichos colonos.

Desde entonces, Xana Gardens, la empresa, envió contratistas, colonos armados y excavadoras para tomar el control de la tierra, que comprende la propiedad de la Iglesia Armenia y las residencias de Nalbandian y otras cuatro familias.

La comunidad armenia, con una historia de 1.600 años, se concentra en el Barrio Armenio y es la diáspora armenia más antigua del mundo.

El patriarca de Jerusalén, el arzobispo Nourhan Manougian, arrendó los terrenos del Jardín de las Vacas a un empresario judío por el término de 99 años. Esta decisión causó mucho revuelo y, después de una larga lucha, se logró anular el trato.

Sin embargo, recientemente las excavadoras comenzaron a demoler parte del lugar en disputa. Cuando los manifestantes armenios intentaron detenerlo, aparecieron colonos judíos israelíes armados que intentaron dispersar a los manifestantes, sin éxito.