Más de 900 combatientes sirios proturcos han regresado en oleadas sucesivas a Siria tras el fin de los combates en Nagorno Karabaj, informó esta semana el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).
Turquía, que apoya a Azerbaiyán, ha sido acusada de enviar a combatientes sirios a Nagorno Karabaj para apoyar a las fuerzas de Bakú, hecho que el presidente Recep Tayyip Erdogan niega.
Estos combatientes han regresado a los territorios bajo control turco en el norte sirio, sobre todo a las regiones de Afrín, Yarábulus y Al Bab, informó a la Agence France-Presse el director de la OSDH, Rami Abdel Rahman.
“El número total de combatientes sirios enviados a Azerbaiyán fue de 2.580”, afirmó, precisando que 293 de ellos murieron en los combates.
Francia había pedido recientemente una “supervisión internacional” del alto el fuego en Nagorno Karabaj para garantizar el regreso de los combatientes extranjeros, en particular los sirios.