Azerbaiyán continúa sus ataques políticos, económicos y, sobre todo, militares contra el pueblo armenio que vive en Artsaj, escribe la periodista turca Uzay Bulut en su artículo en la revista Providence.
"El 12 de diciembre, Azerbaiyán bloqueó el crucial corredor Lachin, que es el único salvavidas para la República de Artsaj. Es el camino de Artsaj hacia el mundo exterior. Este bloqueo significa que Artsaj ahora se ve privado de alimentos, medicinas y otros artículos esenciales entregados a la región a través del corredor de Lachin. Azerbaiyán también ha cortado el suministro de gas a Artsaj, creando otra crisis humanitaria allí. Este es el tercer corte de gas en este año. El 16 de diciembre, se restableció el suministro de gas a Artsaj, pero el bloqueo de Azerbaiyán continúa aislando a los 120.000 armenios que viven en la región del resto del mundo.
Esta agresión no culminó con la guerra azerí-turca de 44 días contra Artsaj en 2020, durante la cual se cometieron numerosos crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad contra los armenios. Las ejecuciones sin juicio, la tortura, el trato inhumano, la destrucción de bienes a gran escala, las deportaciones ilegales y la toma de rehenes eran habituales. Durante la guerra, las fuerzas armadas de Azerbaiyán atacaron deliberadamente a los civiles bombardeando pueblos y aldeas en Artsaj.
El presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, y el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, que apoyan la guerra de Azerbaiyán contra los armenios, han dejado en claro en repetidas ocasiones que su objetivo es limpiar étnicamente la región de su población armenia.
El 29 de enero de 2015, por ejemplo, Aliyev tuiteó: "Armenia ni siquiera es una colonia, ni siquiera es digna de ser un sirviente".
Después de que Azerbaiyán y Armenia firmaran un acuerdo de alto el fuego el 9 de noviembre de 2020, Aliyev se dirigió al pueblo azerbaiyano el 10 de noviembre: "Lo pusimos (al primer ministro armenio Nikol Pashinian) en su lugar. Le enseñamos una lección. Los perseguimos (a los armenios) lejos de nuestras tierras como perros. Dije que los perseguiríamos, que los perseguiríamos como perros, y los perseguimos como perros. Él (Pashinian) ahora está firmando ese documento por miedo, sabiendo que vendremos a Agdam, Kelbajar y Lachin. Nadie puede detenernos. Todos ven nuestra fuerza, todos saben lo que representa nuestro puño de hierro... ¡Dijimos que expulsaremos al enemigo de nuestras tierras! No estamos interesados en ninguna negociación.
En abril de 2021, Aliyev inauguró un "Parque de trofeos de guerra" en Bakú con una exhibición de cascos y muñecos caricaturizados de soldados armenios para deshumanizarlos humillando públicamente a las víctimas y prisioneros de guerra armenios. Aliyev caminó con orgullo a través de una galería de cascos de soldados armenios caídos en el parque.
El Defensor de los Derechos Humanos de la República de Armenia ha publicado un informe público especial titulado "Inaugurado en Bakú un parque de atracciones de soldados armenios asesinados y prisioneros de guerra encadenados: un museo del sufrimiento humano y la propaganda racista". Según el informe: "El parque es una clara manifestación de racismo y violencia relacionada que representa un grave peligro inmediato para los prisioneros de guerra armenios. Las autoridades de Azerbaiyán obviamente saben que esta delicada manifestación, causará angustia y sufrimiento a las familias de los desaparecidos y cautivos, así como a la sociedad armenia en general. La apertura de tal "parque" subraya claramente el odio oficial hacia los armenios en Azerbaiyán y demuestra abiertamente la política estatal de hostilidad y propaganda constante. Esta política, está respaldada por pruebas concretas.
El informe da más ejemplos del grotesco odio de Aliyev hacia los armenios.
En la inauguración del parque, Aliyev dijo: "Un armenio es un bárbaro que cava tumbas y saca los dientes de oro de los muertos".
Y agregó: "Seguiremos expulsando a estos (armenios) mentirosos. Ahora ven quién es quién. Ven que les enseñamos una lección que nunca olvidarán. (...) No tienen conciencia ni moral, ni siquiera cerebro".
"Ereván (la capital de Armenia) es nuestra tierra histórica. Los azerbaiyanos regresaremos a estas tierras históricas. Este es nuestro objetivo político y estratégico, y lo alcanzaremos gradualmente". "Armenia como país no tiene valor. De hecho, es una colonia, un puesto de avanzada gobernado desde el extranjero, un territorio creado artificialmente en las antiguas tierras de Azerbaiyán".
El presidente turco Erdogan también declaró ambiciones de guerra contra Artsaj después de firmar un acuerdo de alto el fuego.
En un "desfile de la victoria" organizado en Bakú para celebrar la "victoria militar" conjunta de Turquía y Azerbaiyán sobre Artsaj, Erdogan pronunció un discurso elogiando a Enver Pasha, uno de los organizadores del Genocidio Armenio de 1915 en la Turquía otomana, que se cobró la vida de unos 1,5 millones de armenios. También se puso en escena, una marcha militar otomana durante el evento.
Erdogan se refirió al Ejército Islámico del Cáucaso de 1918, creado por Enver Pasha y dirigido por el comandante otomano Nuri Pasha. El Ejército Islámico del Cáucaso fue responsable de las masacres de la población no musulmana de Bakú, que consistía principalmente de armenios. Erdogan dijo en ese momento: "Hoy es el día en que las almas de Nuri Pasha, Enver Pasha y los valientes soldados del Ejército Islámico del Cáucaso son bendecidas".
Con sus acciones y declaraciones, tanto Aliyev como Erdogan afirman que buscan otro ataque contra el pueblo armenio en la región. Ante nuestros ojos se está desarrollando otro potencial genocidio de armenios. ¿Qué estamos haciendo para evitar esto?".