Los primeros cursos para capacitar a profesores de idioma armenio comenzaron este domingo en la ciudad de Hasakah, en el noreste de Siria, según medios locales .

Los cursos están organizados por el Consejo Social Armenio, que se estableció hace dos años en Hasakah para enseñar el idioma, la cultura y la historia armenia. El objetivo es capacitar a los maestros locales para que enseñen en armenio, que a partir del próximo año formará parte del plan de estudios escolar en las áreas controladas por la Administración Autónoma del Norte y Este de Siria (AANES).

“El gobierno sirio prohibió la enseñanza de otros idiomas en su plan de estudios desde 2011, por lo que no sorprende que los maestros puedan tener dificultades para aprender el idioma al principio”, dijo la profesora de idioma armenio Lucien Ardemian a la agencia local North Press.

La comunidad armenia de Siria se formó principalmente entre 1915 y 1920 por sobrevivientes del genocidio llevado a cabo por Turquía.

Se cree que alrededor de 30.000 personas de origen armenio permanecen en Siria, y aproximadamente 60.000 huyeron del país debido a la guerra, según la Oficina del Alto Comisionado Armenio para Asuntos de la Diáspora. Otras minorías étnicas incluyen kurdos, turcomanos y circasianos.

Aunque Siria es religiosa y étnicamente diversa, los musulmanes sunitas de habla árabe constituyen la mayoría de sus aproximadamente 17 millones de habitantes.

Durante décadas, el estado sirio, gobernado por el partido nacionalista árabe Ba'ath desde 1963, se negó a reconocer la existencia de minorías no árabes, lo que privó a cientos de miles de kurdos sirios de la ciudadanía.

Aumentar el espacio político y cultural otorgado a las minorías no árabes ha estado durante mucho tiempo en la agenda de la AANES, dominada por los kurdos, que introdujo un plan de estudios alternativos que dio espacio a los idiomas locales. Las escuelas kurdas enseñan todas las materias en su propio idioma y las escuelas siríacas hacen lo mismo en su lengua semítica.

Pero a nivel local, muchos se oponen al uso de este plan de estudios alternativo porque no está reconocido por universidades en otras partes de Siria y en el extranjero.