Ursula von der Leyen fue obligada a sentarse lejos del presidente turco, en lo que intentó ser un acto de humillación hacia las mujeres. 

El video produjo una reacción de rechazo en toda Europa por el maltrato que recibió la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen  por parte del presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan. Los titulares de los medios de comunicación han definido su estupor bajo el título de “vergüenza”. En el video se puede observar cómo el líder del gobierno turco optó por sentar a su lado a Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, oficial de idéntico rango que la alemana y a ella en un sillón apartado, lo que fue considerado como un acto premeditadamente machista.

El vocero de la Comisión Europea, Eric Mamer, dio el siguiente comunicado: “La presidenta estaba claramente sorprendida, y eso se puede ver en el video, pero permítanme aclarar que, por muy sorprendida que se haya sentido, eligió -y creo que fue el enfoque correcto- priorizar la sustancia sobre las cuestiones de forma o protocolo, y eso es ciertamente lo que los ciudadanos europeos habrían esperado de ella. No es mi trabajo juzgar qué hay detrás del hecho de que le ofrecimos un tipo de asiento sobre otro“. 

Recordemos que el mes pasado, Turquía se retiró del Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica, también conocido como Convención de Estambul. El acuerdo, firmado en 2011 y conocido como la Convención de Estambul, se gestó para prevenir y combatir la violencia contra las mujeres. Pese a ello, y sin dar razones, Erdogan retiró a su país por decreto presidencial, dando una victoria a los más conservadores y provocando el enfado de la oposición y de miles de manifestantes. Y es que sólo en 2020, en Turquía hubo al menos 300 femicidios.

Eric Mamer enfatizó que la situación vivida por von der Leyen, le dio la oportunidad para mencionar agudamente “la retirada de Turquía del Convenio de Estambul y los derechos de las mujeres. La presidenta de la Comisión discutió sobre todas las áreas de cooperación con Turquía de forma extensa, y pudo expresarse extensamente en la conversación. La mejor respuesta que puedes dar en estos casos es lo que ella hizo: permanecer en la reunión y participar con su protagonismo”.

Los lazos entre Bruselas y Ankara se han tensado después de la supresión de los derechos civiles en Turquía a partir del intento de golpe de Estado en 2016. También la tensión ha ido en aumento por las amenazas que Turquía ejerce sobre la UE con el manejo de los migrantes. Recordemos que en 2016 firmaron un acuerdo según el cual Turquía debe tratar de impedir que los migrantes crucen a Europa a cambio de ayuda y otros tipos de cooperación. Según el convenio, la UE ofreció a Ankara 6.000 millones de euros (7.100 millones de dólares).

Formalmente, Turquía sigue siendo candidato para ingresar a la UE, pero su solicitud está en pausa.