La ambientalista sueca, activista Greta Thunberg, que llegó a Armenia para boicotear la COP29 celebrada en Bakú, visitó el Memorial del Genocidio Armenio.
Fue recibida por la directora del Instituto-Museo del Genocidio Armenio, Edita Gzoian, acompañándola al Memorial del Genocidio Armenio, presentando la historia de la creación de los tres Jachkars colocados en memoria de Hushapat en los años de la guerra de Artsaj, historias de los cinco luchadores por la libertad enterrados en la sección opuesta, enfatizando la conexión entre lo sucedido y el genocidio armenio.
Greta Thunberg honró la memoria de las víctimas inocentes del Genocidio Armenio con un minuto de silencio cerca del fuego eterno.
Edita GzoIan acompañó a la invitada a Hushapat, detrás del cual, en nichos especiales, se colocó tierra extraída de las tumbas de varias figuras públicas, políticos, intelectuales y misioneros extranjeros que alzaron su voz de protesta contra las masacres masivas de armenios en los genocidios perpetrados por el gobierno turco a finales del siglo XIX y principios del XX. Greta Thunberg escuchó con gran interés, especialmente sobre las actividades pro-armenias de la misionera sueca Alma Johansson.
La activista ambiental también visitó el Museo del Genocidio Armenio, donde conoció las exposiciones permanentes y temporales acompañada por la guía turística Elen Akobian, después de lo cual escribió una nota en el diario del museo.
Al final de la visita, la directora del Instituto-Museo del Genocidio Armenio, Edita Gzoian, entregó a los invitados de honor, libros sobre el genocidio armenio y la cuestión de Artsaj.