Hasta la guerra de los 44 días, en 2020, el tema de la modernización del ejército estaba en el centro de nuestra atención; no porque considerara inevitable la guerra, sino porque aumentar la preparación para el combate del ejército podría mejorar considerablemente las posiciones negociadoras de Armenia. El primer ministro Nikol Pashinian afirmó esto en la reunión del lunes del Comité de Investigación de la Asamblea Nacional, para estudiar las circunstancias de las hostilidades desatadas el 27 de septiembre de 2020.

“Desde 2018 hasta el inicio de la guerra de los 44 días en 2020, es decir, en dos años y cuatro meses, el gobierno de Armenia gastó alrededor de 608 mil millones de drams (aprox. 1.250 millones de dólares), en la adquisición de armas y equipo militar. A modo de comparación, permítanme decir que desde el 1 de enero de 2008 hasta mayo de 2018 —es decir, en diez años y cuatro meses—, los gobiernos anteriores de Armenia gastaron 354 mil millones de drams para este fin, es decir, en dos años hemos logrado casi el doble de los logros de diez años", dijo el primer ministro armenio.

Según Pashinian, nadie puede decir que no se hizo nada con el ejército armenio después de que asumió el cargo de primer ministro en 2018, porque el gobierno dijo que no había dinero. Pashinian consideró la adquisición de los aviones de combate SU-30 de Rusia como la mayor prueba.

"Dije: lo que necesite el ejército, lo proporcionaremos, y no es su problema", dijo.

La citada reunión del comité de investigación parlamentaria para estudiar las circunstancias de la guerra de 44 días en 2020 continuará el 27 de junio. El primer ministro Pashinian responderá las preguntas de los miembros del comité ese día.