La parte armenia siempre ha acogido con satisfacción los esfuerzos realizados por los EE. UU. en el proceso de establecer la paz, la estabilidad y la seguridad en el sur del Cáucaso. El Ministerio de Asuntos Exteriores (MFA) de Armenia ha señalado esto en un comentario sobre el comunicado de prensa realizado por el portavoz del Departamento de Estado de EE. UU. el martes.

“Creemos que debería ser obvio para todos nuestros socios que en el proceso de normalización de las relaciones entre Armenia y Azerbaiyán, tanto el reconocimiento de la integridad territorial de cada uno y la inviolabilidad de las fronteras sobre la base de la Declaración de Alma-Ata como el abordaje de los derechos y la seguridad de la gente de Nagorno Karabaj es clave. Como enfatizamos en la declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia el 29 de mayo, el reconocimiento de la integridad territorial de Azerbaiyán no puede interpretarse como una autorización para llevar a cabo una limpieza étnica del pueblo de Nagorno-Karabaj”, continúa el comunicado.

“Es imposible no notar que las declaraciones hechas por el Presidente de Azerbaiyán el 28 de mayo no solo no ofrecieron soluciones dignas a los problemas antes mencionados, sino que también contenían claras amenazas a la soberanía e independencia de la República de Armenia y el derecho del pueblo de Nagorno-Karabaj a vivir con seguridad y dignidad en su patria, que la parte armenia ha dado repetidamente la voz de alarma. Nuestros socios han sido alertados sobre esto muchas veces”, agrega el comentario.

“Creemos que Estados Unidos, basado en sus propios valores de democracia y protección de los derechos humanos y su compromiso e involucramiento en el establecimiento de una paz duradera en la región, debe responder adecuadamente a estas declaraciones para evitar la política expansionista de los azerbaiyanos hacia el territorio soberano de la República de Armenia e intentos de limpieza étnica en Nagorno Karabaj", concluye el comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Armenia.