El 5 del corriente, el presidente Armén Sarkisian participó en la Cumbre Global de Fabricación e Industrialización (GMIS2020) organizada por los Emiratos Árabes Unidos y la ONUDI.

Esta prestigiosa plataforma internacional, que este año se celebró en modalidad online,  reunió a más de 90 líderes de todo el mundo y a jefes de las principales organizaciones internacionales, quienes hablaron sobre las oportunidades para la recuperación económica postpandemia.

Las palabras de apertura estuvieron a cargo del secretario general de la O.N.U., Antonio Guterres. También hicieron uso de la palabra los presidentes de Brasil, Angola, Ghana y el príncipe heredero de Jordania.

El presidente de Armenia, Armen Sarkissian, participó en los debates referidos a "Restaurar la prosperidad en el mundo pospandémico".

Invitado a hablar sobre los cambios rápidos que se producen en el siglo XXI y el impacto de este fenómeno en la economía mundial, el mandatario sostuvo que no se trata solo de revolución sino que la especie humana está atravesando cambios profundos.

“Francis Fukuyama habló del fin de la historia. Probablemente estaba equivocado, pero, al mismo tiempo, tenía razón en el sentido de que la historia de la civilización anterior estaba llegando a su fin. Estamos ante una nueva civilización. A eso lo llamo civilización o una nueva era de nuestro desarrollo, un mundo cuántico, un mundo en el que cada individuo o elemento se vuelve muy poderoso; un mundo en el que lo pequeño puede ser no solo hermoso sino también fuerte.

Desde ese punto de vista, si hablamos de la Revolución Industrial, no la llamo la 4ª Revolución Industrial, sino una nueva era de rápidos cambios, no una revolución sino una evolución rápida”, dijo el presidente de Armenia.

“Así, las revoluciones vendrán una tras otra, serán industriales, científicas, tecnológicas, lo que significa que estaremos en constante cambio. Puede que incluso tengamos una sensación de inestabilidad, pero, al mismo tiempo, estamos entrando en una nueva y gran era mundial. Por lo tanto, probablemente Fukuyama tenía razón en el sentido de que a partir de principios del siglo XXI, alcanzamos un nuevo hito en lo que a la civilización se refiere. Ciertamente, estamos utilizando el conocimiento acumulado en las áreas de ciencia, tecnología, así como los resultados de los desarrollos del siglo XX ”.

En respuesta a la pregunta sobre cómo se prepara el pueblo de Armenia para esa era, el presidente Sarkisian dijo que toda la especie humana se enfrenta a cambios agresivos, rápidos y no solo tecnológicos y de comportamiento sino también relacionados con los valores.

“Antes de avanzar a escala global, necesitamos pensar en el nuevo mundo, debemos reevaluar nuestros principales valores y ciertamente ser muy, muy cuidadosos con lo que hacemos. Creo que la palabra clave aquí es "herencia". Del siglo anterior heredamos estructuras, relaciones internacionales, la ONU, por ejemplo. Necesitamos preservar ese bien y pensar al mismo tiempo qué podemos cambiar, ajustándolo al futuro”, sostuvo el mandatario.

“En cuanto a Armenia, nuestro país también sufrió la pandemia, como cualquier otro país. Enfrentaremos los mismos desafíos, pero la solución aquí es estar a la vanguardia del futuro. Si vemos la sociedad como un tren, es mejor estar más cerca de la locomotora que de los últimos vagones. Para lograrlo, evidentemente se necesita trabajar duro, hacer grandes inversiones. Existe una solución simple y antigua para eso: invertir en educación, ciencia y tecnologías. Este es un mundo cuántico en el que el individuo puede hacer mucho y no importa de dónde venga ese individuo: África, América Latina, Asia o Europa. Por lo tanto, invertir en educación, ciencia y tecnologías, hacer que su país sea un miembro real de la familia internacional en un mundo cuántico. Este es el mensaje.

El futuro está en realizar inversiones en las áreas de educación, ciencia y tecnología. Como presidente, tengo una iniciativa que se llama ATOM (Advanced Tomorrow). Tiene diferentes componentes, principalmente se esfuerza por crear joint ventures con las empresas reconocidas en el área de la inteligencia artificial porque el futuro está en la inteligencia artificial, así como por realizar cumbres internacionales, como la Cumbre de Mentes de Armenia, Festival STARMUS, trayendo a Armenia científicos, investigadores, grandes empresas, todo para el desarrollo futuro. Estoy seguro de que un país pequeño puede ser avanzado. Este es el siglo XXI, y es cuántico, y hay muchos ejemplos: Singapur, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Israel que fueron lo suficientemente inteligentes y tienen diferentes fuentes de ingresos y diferentes oportunidades en el área económica. Todos estos países tienen una cosa en común: en primer lugar, todos invierten en ciencia, educación y tecnologías. Este es el camino hacia el futuro ".

Sobre la cuestión de quiénes serían los socios de Armenia, dada su ubicación en la encrucijada de Europa y Asia, el presidente Sarkisian señaló que "el mundo entero es nuestro socio". “Quiero traer empresas de Estados Unidos, Europa, Asia, del Norte y del Sur. Esa es la razón por la que también me estoy centrando en otra iniciativa. He hablado con los líderes de varios estados pequeños y exitosos y he impulsado la idea de que necesitamos crear un club. Esto no es una alianza, ni una organización internacional, esto no es pro o contra de nada. Este es un lugar donde los estados pequeños y exitosos se reúnen y presentan su experiencia, lo que se ha hecho bien o mal. Este club ayudará a los estados pequeños porque ellos también pueden ser poderosos en el mundo cuántico del siglo XXI”, dijo el presidente. “Les daré un ejemplo simple. Hace treinta años, ¿quién pensaría que los pequeños estados del golfo Pérsico podrían enviar una misión científica a Marte? Es difícil de creer, pero hoy esa es la realidad. Hoy, se abre un nuevo mundo para los estados pequeños e inteligentes, y aspiro a hacer de Armenia uno de ellos ”.

Respondiendo a la pregunta sobre cómo avanzar en el mundo futuro, el presidente Sarkisian señaló que en una transición difícil del viejo al nuevo mundo no se debe pasar por alto la razón, la humanidad y la apreciación de todo lo creado antes.

“Armenia es el primer Estado cristiano del mundo. En nuestro país tenemos turismo étnico, religioso y eco-gastronómico, que sin embargo sufrió la pandemia. La pandemia sigue ahí porque el mundo entero está interconectado; viajamos mucho. Existen todos los requisitos previos para que el virus se propague rápidamente por todo el mundo. El coronavirus nos recuerda que el mundo está cambiando.

Estamos en la encrucijada y no tenemos idea de adónde ir, ¿a derecha o izquierda, con quién, es el mundo unipolar, bipolar o multipolar? Y me preocupa esa incertidumbre porque ante la incertidumbre, cuando se pierde la razonabilidad o la dignidad humana, es muy fácil culpar a otra persona de los errores propios”, dijo el presidente Sarkisian.

“Veo problemas en este mundo que surgen debido a la transformación. Como presidente de la República, he tenido esa experiencia recientemente: mientras Armenia lucha contra el coronavirus, nuestro vecino Azerbaiyán, que también lucha contra el coronavirus, instigó acciones militares en la frontera con Armenia.

Otro vecino nuestro, Turquía, expresó una retórica grosera que para mí, como armenio, es preocupante y me hace retroceder 105 años, cuando el Imperio Otomano llevó a cabo el Genocidio Armenio. También me preocupan las amenazas de los funcionarios azerbaiyanos de atacar la central nuclear de Armenia. Dañará no solo a Armenia sino a todos nuestros vecinos, hasta los países del Golfo y se convertirá en un Chernobyl para la región. Espero que durante esta difícil transición del viejo mundo al nuevo, no perdamos la razón, seamos humanos, nos enfoquemos en el futuro y apreciemos las cosas que creamos antes. Por esa misma razón, utilizo la palabra "herencia". La ONU es un patrimonio muy valioso y poderoso que tenemos en el siglo XXI. Lo único que tenemos que hacer es reforzar y dar un nuevo sentido a esa maravillosa organización que ha jugado un papel especial y útil durante décadas. Eliminar nuestro patrimonio es una forma incorrecta de avanzar. El camino hacia el futuro debe basarse en nuestros éxitos y logros ” -concluyó el presidente Armén Sarkisian.