En 1965, el gobierno soviético se estaba preparando para celebrar el 50^º aniversario de la Gran Revolución de Octubre de 1917. El gobierno invitó a los cineastas para discutir las perspectivas de hacer nuevas películas dedicadas a la revolución bolchevique. Entre los invitados se encontraba el director de cine armenio Edmond Keosaian, de 29 años, originario de Leninakan,conocida ahora como Gyumri,la segunda ciudad más grande de Armenia.

Era joven y quizás menos experimentado que los demás. Sin embargo, era conocido por su energía imparable y su temperamento para la experimentación. Más importante aún, unos años antes, Keosaian produjo una comedia sobre una cocinera que se convirtió en una de las comedias más famosas de su tiempo. Confió el papel principal del cocinero a Svetlanna Svetlichnaya, también nacida en Leninakan, donde su padre, un oficial del Ejército Rojo, había estado destinado en ese momento. Más tarde se convirtió en una famosa actriz rusa.

Uno de los principales problemas a los que se enfrentaban los productores soviéticos con el 50^º aniversario era cómo preparar películas para atraer público soviético. La sociedad parecía estar cansada de la estricta propaganda que saturó la cultura en las décadas posteriores a la revolución.

En los días del liderazgo de Nikita Khrushchev, desde mediados de la década de 1950 hasta la de 1960, algunas películas occidentales comenzaron a proyectarse en la Unión Soviética y se tradujo algo de literatura. Para sorpresa del gobierno, muchas películas estadounidenses despertaron un interés del público increíble, mucho mayor que muchas de sus películas soviéticas contemporáneas. En 1961, el director de cine John Sturges vendió un número récord de 67 millones de entradas para el western estadounidense "Los siete magníficos", superando a cualquier otra película soviética o extranjera proyectada en la URSS hasta entonces.

En la discusión de 1965, Keosaian llamó la atención sobre este precedente y sugirió que se adoptara un nuevo enfoque. Según Keosaian, las películas sobre la revolución deberían centrarse menos en la revolución en sí, presentar aventuras, paseos a caballo, tiroteos y acción que aún permanecerían dentro del alcance del contexto revolucionario. Keosaian básicamente habló a favor de rodar una película al estilo occidental en la URSS, un género totalmente nuevo para la cinematografía soviética. Según algunas fuentes, hubo un momento de vacilación por parte de los supervisores. Emular un estilo cinematográfico estadounidense en los años de la Guerra Fría fue una idea desafiante. Sin embargo, el gobierno finalmente aceptó la iniciativa.

A finales de 1966, la película de Keosaian sobre cuatro adolescentes (tres de nacionalidad eslava y un gitano) estaba lista. Los cuatro magníficos, a pesar de su corta edad, montaban hábilmente a caballo, disparaban con armas de fuego y realizaban todo tipo de trucos: ayudar a los pobres y perseguir a los opresores. En abril de 1967, en la Casa del Cine de Moscú, tuvo lugar el estreno de "Los Escuridizos Vengadores".

La valoración pública de la película superó todas las expectativas. Una colegiala le escribió una carta a uno de los actores diciendo que había visto la película 50 veces. En la cinematografía soviética, si una película recuperaba los gastos dentro de un año después de su lanzamiento, se consideraba una historia de éxito. Con más de 50 millones de entradas para el cine vendidas, “Los vengadores” de Keosaian pagó su presupuesto dentro de las ocho semanas posteriores al lanzamiento y aseguró ingresos sustanciales en los meses siguientes. Keosaian también hizo la primera secuela en la URSS al producir dos películas más que describen las aventuras de los cuatro vengadores. En ambos casos, con más de 60 millones de entradas vendidas, Edmond Keosaian obtuvo nuevos récords, por lo que saltó a la cima de la lista de los cineastas soviéticos más exitosos.

A pesar de su éxito rotundo, Keosaian nunca olvidó sus raíces étnicas. Con frecuencia incluyó a actores armenios en las películas. Armen Dzhigarkahnian, Eduard Abalian, Sergey Potikian, Artem Karapetian y Laura Keosaian (su esposa) aparecieron en sus películas con muchos compatriotas que formaban parte de su equipo técnico. Keosayan también dirigió dos películas en la propia Armenia. El primero fue "The Men" [ Tghamardik ], una comedia, en 1973 y luego, en 1978 "Star of Hope" [ Huso Astgh ]. Este último es un drama histórico dedicado a la lucha del pueblo armenio en la región de Syunik de Armenia. Un monumento en la calle Zorian de Ereván, no lejos de la Ópera, representa al grupo de amigos que aparecen en la película "The Men".

Un pequeño detalle revela algo de los sentimientos de Keosaian sobre la identidad armenia. En una película llamada “Cuando llega septiembre” (1975), un anciano armenio vuela a Moscú para llevar a su nieto por primera vez a la escuela el 1 de septiembre, cuando comienza oficialmente el año escolar. En una de las escenas finales, el hombre se emborracha y canta una canción armenia. La voz en ruso de la canción relata algunos contenidos sobre manzanos. Sin embargo, la audiencia armenia pudo entender que en realidad la canción estaba dedicada a los fedayines armenios. " Hai fedainer, djhan fedainer, dzer mairere dzez ghurban ", cantó el anciano.

Edmond Keosaian falleció en 1994. Sus dos hijos, Tigran y David, se dedican a la producción cinematográfica. 

Pocos cineastas soviéticos siguieron su ejemplo creando más westerns de tipo soviético. Sin embargo, el nuevo género finalmente se conoció como oriental, con fines distintivos.

Haigaram Nahapetian 

The Armenian Mirror-Spectator